(31 de marzo del 2022, El Venezolano).- Una encuesta a empleadores del sector privado realizada por el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) reveló que, en promedio, el salario mínimo percibido por los trabajadores es de $100 y cada vez es más frecuente el pago en dólares.
Los resultados del primer trimestre de 2022 demuestran un incremento importante en la remuneración con respecto al mismo período de 2021, pues al cierre del primer trimestre del año pasado el salario mínimo era, en promedio, de unos $50, la mitad del sueldo actual.
El OVF dividió su encuesta salarial en tres sectores y determinó que los promedios para cada uno son de $234,7 para los gerentes, $152,7 para los profesionales y $100 para los obreros. Al englobar a todos los encuestados se determinó que el promedio general es de $108,7.
Pese a este incremento, las condiciones apenas han mejorado para los trabajadores, ya que su poder adquisitivo es prácticamente igual, más allá del aumento nominal. Debido al encarecimiento de los bienes y servicios, los trabajadores del sector público que perciben estos $100 tienen una capacidad de compra similar a cuando recibían $50.
Para febrero de 2021, la Canasta Alimentaria Familiar calculada por el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM) tenía un precio de $281,97. Un año después, el febrero pasado, la misma canasta se estimó en $454,93. Esto constituye un incremento del 61,95%. Con el salario mínimo del sector privado solo se puede cubrir un 21% de la canasta.
Según la hipótesis del OVF, la principal razón de este fenómeno tiene que ver con la sobrevaluación del bolívar, ya que el tipo de cambio se ha quedado estancado en Bs 4,5 por dólar mientras que la inflación en bolívares ha seguido escalando.
Otras ideas apuntan a que la «inflación en dólares» es consecuencia del proceso inflacionario ordinario que sufre cualquier economía cuando la masa monetaria crece sin que la producción le siga el ritmo. Ahora hay más dólares en el país, pero la industria sigue en un estado deplorable y la producción de bienes y servicios no ha aumentado con la misma proporción a la cantidad de dólares que hay en la calle. En términos simples, hay más dólares para los mismos productos, por lo que estos son más costosos.
Ambos fenómenos tienen peso en una economía bimonetaria como la venezolana, donde tanto el bolívar como el dólar tienen protagonismo y son afectadas por las políticas monetarias implementadas por el gobierno de Nicolás Maduro, reportó Tal Cual.
En este contexto, la dolarización sigue extendiéndose a un ritmo acelerado, como lo indican las cifras del OVF. De acuerdo con la encuesta, hubo un avance importante tanto en la marcación de precios como en el pago a proveedores en divisas.
Los números indican que la fijación de precios en dólares avanzó de un 26,6% en diciembre de 2021 a un 42,4% en marzo de 2022. Mientras tanto, los pagos en divisas a proveedores subieron de un 46,9% a un 51,1% en este mismo período de tiempo.