(09 de enero del2021. El Venezolano).- La victoria de Biden hace que los venezolanos que de una u otra forma estamos en la posición de aupar la salida cuanto antes del dictador y de su camarilla, discutimos y en oportunidades agriamente, sobre si el neo presidente mantendrá una posición fuerte con respecto a Maduro, así como lo ha hecho el actual presidente Trump.
Porque no podemos negar que el actual presidente desde prácticamente el inicio de su mandato planteó en muchas oportunidades la necesidad de la salida de Maduro y su banda. Recordemos cuando Trump ante las preguntas de los periodistas durante las sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas que pensaba hacer para encontrar una salida a la dictadura respondió: «Todas las opciones están sobre la mesa» y nuestra compatriota y excelente periodista Carla Angola preguntó : todas presidente? todas incluyendo la militar? y Trump respondió: he dicho todas y apuró el paso hacia el salón central de la Asamblea General. La fecha? El 26 de septiembre del año 2018 o sea casi 2 años y medio antes de que finalizara su mandato, eran los días cuando estaba en la cresta de la ola como popularidad.
Tenía un 65 % de aceptación. Obviamente la salida que muchos han deseado y con la cual muchos soñaban era esa, la militar y es fácil de entender. Pero el presidente Trump no lo hizo, no dio el paso tan esperado y los U.S. marines se quedaron en Fort Hood.
Es verdad que, y creo que todos los demócratas, no solo los venezolanos, sino todos los demócratas del mundo lo agradecemos, ya que apretó en forma muy fuerte a Maduro y su grupo.
La fiscalía de los Estados Unidos llevó ante los tribunales una querella del estado contra Maduro, Cabello, Padrino y El Assaime, con la gravísima acusación de ser responsables del financiar el negocio del tráfico internacional de estupefacientes y sustancias psicotrópicas, dicho en otras palabras son acusados de ser unos vulgares y despreciables traficantes de cocaína. Hechos sin precedentes en la historia latinoamericana y que inspiran vergüenza ajena, ya que aparecen sus fotografías en los postes del alumbrado de todas las ciudades americanas con el título nada honroso de WANTED.
El reconocimiento que le hizo Donald Trump a Guaidó fue decisivo para lograr que otros 58 países, fundamentalmente las más grandes democracias del mundo reconocieran a Guaidó y a la Asamblea Nacional como, y porque así es, la única institución democrática en Venezuela y por ende lo que esto significa en el reconocimiento del presidente de la Asamblea Nacional como presidente encargado. Entonces no me queda de otra que decir, Gracias Presidente Trump.
Ahora bien veamos que ha dicho y prometido el Presidente Biden con respecto al drama que vive la que fue la nación más prospera de la América latina, cuando aún bregaba los votos del Estado de la Florida.
En sus intervenciones delante los electores hispanos, muchos de ellos venezolanos con la nacionalidad americana, Joe Biden comparte con Donald Trump la idea de que Maduro debe ser reemplazado en el Palacio de Miraflores, después de que las elecciones de 2018 fueran consideradas fraudulentas por buena parte de la comunidad internacional. En ese cuadro, es probable que Biden mantenga las sanciones contra la petrolera estatal PDVSA en el corto plazo, “No buscamos desmantelar la política de sanciones, sino aplicar sanciones de manera inteligente, ayudados por un esfuerzo multilateral y con metas específicas a alcanzar, principalmente elecciones libres, justas y creíbles”, dijo el Venezolano Americano Leopoldo Martínez, quien es uno de los jefes de estrategia de la campaña del senador de Delaware el 21 de Octubre de este año 2020. [1]
Además, es probable que un Gobierno de Biden también presione porque el gobierno de Maduro acepte la ayuda humanitaria en Venezuela, donde gran parte de la población ha sufrido las consecuencias de las sanciones al petróleo, el sustento de su economía.
Pero más allá de las especulaciones, lo cierto es que en la campaña electoral e incluso antes de eso, el ahora presidente electo estadounidense ha dado una serie de definiciones sobre Venezuela, que podrían reflejar su política para los próximos años.
En septiembre, un comunicado del equipo de campaña del dirigente demócrata señaló cuáles serían sus objetivos al respecto del país latinoamericano: “Organizaré a la comunidad internacional para dar una respuesta sólida a la crisis humanitaria de Venezuela, haré responsables a Maduro y a los partidarios del régimen por la corrupción y los abusos de los derechos humanos, y encabezaré los esfuerzos internacionales para presionar por unas elecciones libres y justas”. Esa declaración del Presidente electo la saludo con aprecio, porque como he venido sosteniendo la situación de Venezuela es hoy día y muy a pesar de nosotros, un problema geo político que conlleva una solución con la participación de varias súper potencias, sin olvidar la necesaria participación de nuestros vecinos, igualmente víctimas indirectos de los crímenes de la dictadura. Durante una visita a Miami en el pasado mes de octubre, Biden declaró que Nicolás Maduro “es un dictador, simple y llanamente.
Está causando un increíble sufrimiento al pueblo venezolano” y. frente a esto, consideró que los venezolanos necesitan el apoyo de Estados Unidos “para recuperar la democracia y reconstruir el país”.
En febrero de 2019, Biden instó a los gobiernos del mundo a declarar su apoyo a Juan Guaidó, líder de la Asamblea Nacional de Venezuela y presidente interino del país, con el objetivo de lograr una transición democrática en el Palacio de Miraflores.
Recordemos que también el neo Presidente Biden aplaudió de pie cuando JuanGuaidó fue citado por el Presidente Trump en la sesión bicameral del congreso con motivo discurso del Estado de la Unión el 5 de febrero del 2019.
“Solo un tirano impediría la entrega de alimentos y medicinas a las personas que dice liderar. La comunidad internacional debe apoyar a Juan Guaidó y a la Asamblea Nacional. Es hora de que Maduro se haga a un lado y permita una transición democrática. El pueblo venezolano se merece algo mejor”, afirmó
Bueno creo que muchos de nosotros somos y creo que con razón pesimistas, cuando se habla de tratar de convencer a esos criminales de apartarse y permitir unas elecciones libres y democráticas., La mayoría de los demócratas venezolanos estamos preocupados porque son los Estados Unidos de América, la primera potencia del mundo, la que puede ser decisoria en la recuperación de nuestro país.
Confiemos que ni el Presidente Biden, ni Joseph Borrell, ni la Unión Europea ni ninguno de los países que aun actuando de buena Fe, piensen que la solución para transitar de la dictadura a la democracia seria borrón y cuenta nueva. Esperemos que no.
Porque sería muy difícil de olvidar, aunque sea solo por un minuto, que es un gobierno el cual se mantiene gracias al soporte que le dan unas fuerzas armadas con altos niveles de corrupción y lo que es peor aún, sirviéndole a la dictadura como perros de guardia al ser los ejecutores directos de delitos de Lesa Humanidad, entre otros fusilamientos y torturas utilizando las técnicas más brutales y salvajes que ser humano en sus peores pesadillas pueda imaginar. Y eso, eso queridos señores, eso no tiene perdón de Dios. ROC
Anfi del Mar, Gran Canaria.