(15 de diciembre del 2019. El Venezolano).- El gobierno en funciones de Pedro Sánchez está pagando el ‘peaje’ de su acuerdo por Podemos. Es decir, ha comenzado su proceso de aproximación y reconocimiento de la dictadura de Nicolás Maduro. El Secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica y el Caribe, Juan Pablo de Laiglesia y González de Peredo, ha avanzado en la tarea de complacer a Pablo Iglesias con una reunión con Jorge Arreaza, el ministro chavista del Poder Popular para Relaciones Exteriores. En el encuentro, que fue valorado de «extenso y positivo» por el funcionario bolivariano, se analizaron «situaciones regionales en América Latina y Europa, el diálogo político en Venezuela y nuestras relaciones bilaterales».
Según la información difundida por el Ministerio de Asuntos Exteriores de España, Juan Pablo de Laiglesia y González de Peredo puso a disposición del líder chavista al «gobierno de España y de sus socios del Grupo Internacional de Contacto a contribuir al retorno de Venezuela a la institucionalidad democrática». Una situación peligrosa, ya que podrá volver a caer en el saco vacío de las negociaciones al mejor estilo Zapatero. Para intentar disimular que mantuvieron una reunión íntima con el representante de la dictadura venezolana (a pesar de que Pedro Sánchez reconoció a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela), el Secretario de Estado «reiteró la inquietud española por la situación humanitaria en Venezuela y le animó a reforzar la cooperación con la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos«.
Sin embargo, no es la primera vez en los últimos días que el PSOE ha mostrado su interés en volver a tender puentes con la dictadura chavista.
Servidumbre socialista
El diputado de Vox, Hermann Tertsch, destapó el conchabeo entre el eurodiputado socialista Javier López Fernández y la embajadora del régimen de Nicolás Maduro, Claudia Salerno Caldera; justamente siendo ella la encargada de representar al tirano venezolano ante Bélgica, Luxemburgo y la Unión Europea.
A través de sus redes sociales, Hermann Tertsch afirmó que «el PSOE ya es, como Podemos, pura servidumbre del régimen criminal de Maduro en el Parlamento Europeo. La embajadora de la tiranía, Claudia Salerno, sin acreditación, asistió a un almuerzo del presidente de EuroLat, Javi López (PSOE), a espaldas de todos los vicepresidentes». En este sentido, el representante socialista español infiltra en una actividad de la institución europea a una funcionaria chavista que, como un Caballo de Troya, tiene por finalidad intentar mover todos los hilos que permitan erradicar las sanciones contra el régimen bolivariano.
El propio diputado de Vox le recuerda al PSOE y deja constancia que Claudia Salerno es «una feroz militante del ala más radical del régimen narcocomunista, condenado por resolución parlamentaria y declarado ilegítimo tras reconocerse la presidencia de Guaidó». En la misma línea, destaca que, por culpa de los socios de Podemos, la enviada de la tiranía chavista «asistía en sede del Parlamento a una reunión sobre Mercosur, gracias al socialista López». Una situación que se agrava más al conocer que «Javi López, recién nombrado presidente de la Delegación de EuroLat, ya recibió protestas de varios grupos por usar el nombre de la delegación en una comunicación de clara manipulación izquierdista». Además, también recibió reprimendas porque eran publicaciones «no acordadas y publicadas a espaldas del resto de miembros de la presidencia», explica Hermann Tertsch.
«Todo esto en el marco de un enrarecimiento claro de las relaciones en el Parlamento respecto a Iberoamérica, tras la inaudita y obscena declaración de Josep Borrell ante la Comisión de Exteriores al asegurar que la crisis humanitaria de Venezuela se debe a las sanciones de EEUU», sentencia el representante de Vox, haciendo referencia al debut del Alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores donde también llegó a afirmar que la ola de manifestaciones violentas en la región responden a las «desigualdades sociales», pero ignorando las denuncias y demostraciones de los planes desestabilizadores provenientes de Venezuela y Cuba.