(28 de enero del2021. El Venezolano).- Venezuela está entre los países con el sistema más corrupto del mundo de acuerdo con el informe anual de Transparencia Internacional publicado este jueves.
En este sentido detalla que el impacto de este flagelo en los medios de salud en plena pandemia.
Desde 1995, el Índice de Percepción de la Corrupción de Transparencia Internacional recoge la opinión que diversos organismos e instituciones tienen del sector público de cada país. Clasificando a las 180 naciones analizadas de 0 a 100 según su sistema sea más o menos corrupto.
Dinamarca (88), Nueva Zelanda (88) y Finlandia (85) son los países que salen mejor parados del estudio, un podio invariable desde 2012. En el lado contrario, Siria (14), Somalia (12) y Sudán del Sur (12); son los países con los índices de corrupción más elevados. La media mundial de este ranking es 43.
En América Latina, Venezuela (15), Haití (18) y Nicaragua (22) son los países donde la corrupción está más presente. Mientras que Uruguay (71) y Chile (67) se mantienen desde 2012 como los mejores alumnos del continente.
En el caso de Venezuela, es el quinto país y su nota no deja de empeorar desde 2013.
Lea También: La OEA condena la detención “ilegal” de dos barcos guyaneses por parte de Venezuela y exige su liberación
Países con corrupción dedican menos recursos a la salud
TI centró su informe de 2020 en el impacto que la corrupción ha tenido en la gestión de la epidemia de coronavirus. Los países con niveles más altos de corrupción dedican menos recursos a la salud, lo que afecta los servicios públicos esenciales.
Venezuela perdió por la corrupción al menos 5.000 millones de dólares en las últimas dos décadas; lo que afecta directamente a la salud de los venezolanos, dijo a la AFP Luciana Torchiaro, responsable regional de TI para América Latina.
Por su parte, la percepción de la corrupción pública en Estados Unidos (67) también empeora, y el informe de TI le atribuye la nota más baja desde 2012.
La ONG señala en particular los obstáculos que el gobierno de Donald Trump puso para supervisar los casi 900.000 millones de dólares destinados a luchar contra los efectos del covid-19.
“El covid-19 no es solo una crisis sanitaria y económica: es una crisis de corrupción. Y no la estamos superando”, declaró Delia Ferreira Rubio, presidenta de TI, citada en el informe.
De acuerdo con un informe publicado por TI en 2019, la corrupción en el mundo le cuesta a los sistemas públicos de salud 500.000 millones de dólares cada año.
La contracara de esto es Uruguay, que según el informe de TI tiene la inversión en salud más alta de la región, lo que le permite tener un buen sistema de seguimiento epidemiológico que ha sido de gran ayuda a la hora de afrontar el covid-19.