(04 de mayo del 2022. El Venezolano).- El patriarca Kirill, también conocido como Cirilo I de Moscú se ha expuesto a ser sancionado por la UE. La Comisión Europea ha recomendado sancionarle. El líder religioso se suma así a la lista de empresarios y políticos rusos sancionados a raíz de la invasión de Ucrania, que Kirill ha defendido con vehemencia, a veces con proclamas homófobas. «La guerra es correcta porque es contra el ‘lobby’ gay», llegó a afirmar. En el mes de marzo, El Vaticano quiso promover una reunión entre el Papa Francisco y Kirill de Moscú, un encuentro que finalmente descartó para evitar «confusiones».
La actitud del patriarca ortodoxo ha tenido ya peso en la fe de los ucranianos, que están optando por alejarse de la Iglesia de Moscú, mientras gana fuerza la creación de una Iglesia ortodoxa ucraniana.
Patriarca de Moscú y dueño de una fortuna sospechosa
El cargo que ostenta Kirill, nacido Vladímir Mijáilovich Gundiáyev (Leningrado, 1946) le confiere la supremacía sobre la Iglesia ortodoxa rusa, con una alusión -«todas las rusias»- que retrotrae a la época imperial. En la suma de Rusia, Bielorrusia y Ucrania, Kirill lidera a más de 150 millones de fieles, aunque sus seguidores en Ucrania, dada la posición ante la guerra, están en entredicho.
Pero cuestiones de fe al margen, al patriarca de la Iglesia rusa, ordenado en 1969 y que ocupó altos cargos en la jerarquía ortodoxa rusa (obispo de Víborg, arzobispo de Smolensk, Viazma, Smolensk y Kaliningrado), se le atribuyen pecados más mundanos y que él niega, reportó abc.es
Esos pecados tienen que ver con los rublos, y la acusación de tener más monedas que fieles. El periódico de investigación ‘ Proekt’ publicó en 2020 que la fortuna del patriarca y de sus familiares, con propiedades en Moscú que cifraba en más de 225 millones de rublos (3,2 millones de euros, al cambio actual), que incluyen un apartamento de 145 metros cuadrados de su propiedad, otro de 300 a nombre de su prima Lidia Lorenova.
Estas propiedades son, en todo caso, una pequeña muestra de su patrimonio, que ‘ Novaya Gazeta‘ estimaba, en 2019, en entre 4.000 y 8.000 millones de dólares (entre 3.800 y 7.600 millones de euros) producto de negocios en la joyería, la automoción, el petróleo o la pesca.
Es contra ese patrimonio contra el que actuaría la Comisión Europea, según el anuncio realizado este miércoles.