(10 de octubre del 2021. El Venezolano).- El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, pidió a la comunidad internacional mayor financiación en salud mental, ya que los efectos provocados por la inseguridad laboral o la pérdida de familiares “pueden durar más que la propia pandemia”.
En un comunicado distribuido en la víspera del Día Mundial de la Salud Mental, que se celebra este domingo, Guterres recordó también las enormes desigualdades que existen en el acceso a recursos de salud mental.
“En países de rentas altas, más del 75 por ciento de la gente con depresión asegura que no reciben atención adecuada, y en los de rentas bajas y medias, más del 75 por ciento de la gente con problemas de salud mental no recibe ningún tratamiento”, ha lamentado el portugués.
Guterres tildó de “inaceptable” que la media de gasto de los Gobiernos en salud mental sea del 2 por ciento de los fondos destinados a la salud.
El día anterior, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó de que no se han cumplido la mayoría de los objetivos para 2020 del Plan Exhaustivo de Salud Mental.La pandemia podría intensificar las enfermedades mentales (FOTO: EFE)
“Es extremadamente preocupante que, a pesar de la evidente y cada vez mayor necesidad de servicios de salud mental, aún más acuciante durante la pandemia de COVID-19, a las buenas intenciones no las acompañe la financiación”, aseguró el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
“No hay salud sin salud mental”, advirtió Tedros. Pidió a los países que aceleren el incremento de la financiación en políticas de salud mental.
Por su parte, Guterres se refirió especialmente a la situación de los niños, que “pueden sentirse alienados y angustiados” durante la pandemia de coronavirus.
Según la OMS, alrededor del 25 por ciento de los niños y adolescentes del mundo sufren algún problema de salud mental, mientras que el suicidio es la segunda causa de muerte entre las personas de 15 a 29 años de edad.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la salud mental como ‘un estado de bienestar en el que la persona realiza sus capacidades y es capaz de hacer frente al estrés normal de la vida, de trabajar de forma productiva y de contribuir a su comunidad’. En algún punto, la pandemia alteró todos y cada uno de los aspectos que conforman esta definición; por eso, no sorprende que los especialistas estén identificando en nuestro país incrementos en los casos de trastornos de salud mental, con distintos niveles de gravedad.
(Con información de Europa Press)