(28 de agosto del 2019. El Venezolano).- El excandidato presidencial evangélico Javier Bertucci anunció este miércoles el inicio de una gira por Venezuela que incluirá visitas a hospitales para entregar medicinas y “tratamientos específicos” a los pacientes crónicos afectados por la escasez de medicamentos.
En una rueda de prensa, Bertucci, líder del partido evangélico Esperanza por el Cambio, indicó que logró reunir medicinas por donativos de organizaciones cristianas en Estados Unidos y Europa.
“No vamos a esperar que se nos muera alguien para salir entonces a denunciar que alguien se nos murió, vamos a tratar de impedir que se nos muera más gente”, dijo, según EFE.
Señaló que la meta es llegar a ayudar a un millón de personas que lo necesiten, pues, según la Organización de Naciones Unidas, en Venezuela 1 de cada 4 ciudadanos necesita asistencia humanitaria.
Indicó que su equipo estará desplegado hasta diciembre “en todos los hospitales” pendientes de los pacientes con enfermedades crónicas y que instalarán “farmacias de la esperanza” en ocho de los nosocomios más grandes del país.
Explicó, además, que su organización también buscará ayudar a los médicos y maestros con bolsas de alimentos, que aseguró que están siendo comprados en Venezuela con dinero donado.
Lea también: Médicos venezolanos se lucen en el sistema de salud argentino
Según explicó, las donaciones provienen de “organizaciones cristianas” que de forma “organizada recolectan medicinas y luego las envían” desde el extranjero.
Es “un trabajo de hormiga, son muchas, ciento y algo de organizaciones que trabajan arduamente para enviar una cantidad importante”, apuntó sin detallar cuántas medicinas ha logrado reunir.
Bertucci informó también que ha sostenido dos encuentros con Nicolás Maduro, a quien le pidió aceptar ayuda “venga de donde venga”, y abogó por una salida negociada a la crisis y con elecciones libres.
El líder religioso, quien ha mantenido un perfil bajo en la palestra política en los últimos meses, participó en las polémicas elecciones presidenciales de mayo del año pasado, no reconocidas por buena parte de la comunidad internacional y en las que Maduro se impuso con una abstención de 53,98 %.