(23 de noviembre del 2023. El Venezolano).- El vino tinto, compañero clásico de las cenas de Acción de Gracias, podría tener un oscuro secreto detrás de sus taninos y sulfitos: la quercetina. Este compuesto, presente en la piel de las uvas, podría ser responsable de los persistentes dolores de cabeza que afectan a algunos bebedores, según un reciente estudio científico.
Científicos que han investigado durante años los motivos detrás de los dolores de cabeza relacionados con el vino tinto señalan a la quercetina como el nuevo sospechoso. Andrew Waterhouse, profesor emérito de enología de la Universidad de California en Davis, explica que este compuesto, que protege a las uvas de la luz ultravioleta, puede causar estragos cuando se combina con el alcohol del vino.
A diferencia de las antiguas teorías que culpaban a los taninos, sulfitos y histaminas, el estudio ahora resalta el papel de la quercetina en el desencadenamiento de dolores de cabeza. Waterhouse indica que la cantidad de quercetina en el vino está directamente relacionada con la exposición al sol de las uvas. Las uvas cultivadas a la sombra contienen menos quercetina, mientras que las expuestas al sol producen más, afectando potencialmente a quienes consumen el vino resultante, reportó Infobae.
Aunque la quercetina tiene beneficios como antioxidante en el cuerpo humano, su interacción con el alcohol puede obstaculizar el proceso de eliminación del mismo, causando dolores de cabeza. Morris Levin, coautor del estudio y profesor de neurología, menciona que, a diferencia de las resacas, los dolores de cabeza por vino tinto pueden ocurrir minutos o horas después de beberlo, siendo distintos y más punzantes.
El consejo para los amantes del vino tinto que desean evitar estos dolores de cabeza parece ser optar por vinos más baratos, ya que suelen contener menos quercetina. Sin embargo, Waterhouse advierte que esto podría afectar el sabor y la calidad del vino, ya que las uvas menos expuestas al sol pueden tener menos quercetina, pero también menos taninos suavizantes.
La investigación aún está en curso, y los científicos planean realizar ensayos clínicos para confirmar la influencia de la quercetina en los dolores de cabeza por vino tinto. Mientras tanto, queda la incertidumbre: ¿serán siempre los dolores de cabeza el precio a pagar por disfrutar de una copa de vino tinto?