(28 de noviembre del 2024. El Venezolano).- El día de Acción de Gracias ha sido por muchas décadas un evento muy especial en las familias estadounidenses. Algunos afirman que esta fecha quizás es más importante que la Navidad y el Fin de Año, un momento en el año cuando donde nos reunimos con nuestros familiares.
Escrito por: Sandra Ramone
El origen de este día, Thanksgiving Day en inglés, se encuentra en los tradicionales festivales de cosechas que se hacen en algunas partes del mundo.
Se trata del famoso “Thanksgiving day”, cuando en 1620 los peregrinos viajaron desde Inglaterra a las Américas en el barco Mayflower y desembarcaron en Plymouth en el actual estado de Massachussets. Considerados los primeros inmigrantes de Norteamérica, escapaban de las constricciones de la iglesia de Inglaterra y de la pobreza.
Su primer invierno en el Nuevo Mundo fue muy difícil. Pasaron hambre, frío y murieron la mitad de los colonos. En la primavera siguiente, ayudados por los indios Wampanoag, aprendieron a sembrar maíz, a cultivar alimentos, a cazar y a pescar.
En el otoño de 1621 fueron recolectadas generosas cosechas y como muestra de agradecimiento religioso, los colonos organizaron un festín denominado históricamente “The America’s First Thanksgiving”. En 1623, un día de ayuno y oración durante un periodo de sequía, fue cambiado a uno de acción de gracias porque la lluvia llegó durante las oraciones.
En los años siguientes, el congreso de los Estados Unidos proclamó en varias ocasiones el Día de Acción de Gracias y finalmente, el 1° de noviembre de 1777 fue declarado oficialmente como día feriado.
La tradición del pavo fue impulsada por Benjamín Franklin, quien deseaba hacerlo el símbolo nacional de los Estados Unidos ya que es un corredor muy rápido, cauteloso, de muy buena vista y exhibía una postura de la realeza. Mientras el águila ganó al pavo como símbolo de los Estados Unidos, Norman Rockwell logró hacer famosa la imagen de un pavo en este día de las familias.
De nuevo, el 1º de enero de 1795, el primer presidente, George Washington, escribió su famosa proclamación de acción de gracias, en la cual dice que es… “nuestro deber como personas con reverente devoción y agradecimiento, reconocer nuestras obligaciones al Dios todopoderoso, e implorarle que nos siga prosperando y confirmado las muchas bendiciones que de El experimentamos…”
Varios años más tarde, el 3 de octubre de 1863, Abraham Lincoln, lo proclamó por carta del congreso, un día nacional. “El cuarto jueves de noviembre, es un día de acción de gracias y adoración a nuestro padre benefactor, quien mora en los cielos”. En esta proclamación de acción de gracias, el 16º presidente dice que es… “anunciado en las Sagradas Escrituras y confirmado a través de la historia, que aquellas naciones que tiene al Señor como su Dios, son bendecidas. Pero nosotros nos hemos olvidado de Dios. Nos hemos olvidado de la mano que nos preserva en paz, nos multiplica, enriquece y fortalece. Vanamente nos hemos imaginado, por medio del engaño de nuestros corazones, que todas estas bendiciones fueron producidas por alguna sabiduría superior y por nuestra virtuosidad. Me ha parecido, apropiado que Dios sea solemne, reverente y agradecidamente reconocido como en un corazón y una voz, por todos los americanos…”
Por eso es que cada año en el Día de Acción de Gracias, los estadounidenses se unen para dar gracias al Dios todopoderoso por todas sus bendiciones y misericordias durante el año.
Una ocasión familiar para comprar
La festividad de Acción de Gracias, cada vez más ha venido dejando de ser un día sagrado donde los seres queridos se reúnen para agradecer los dones, para convertirse en un día comercial, donde las grandes firmas y tiendas anuncian ofertas y, cada vez con horarios de apertura más tempranos, incluso antes de la medianoche del jueves.
Hasta hace algunos años, pocas tiendas abrían el cuarto jueves de noviembre. Lo tradicional era dedicar el día siguiente, conocido como el “Black Friday” o “Viernes negro”, a realizar todas las compras posibles a unos precios muy convenientes, dando inicio a la temporada navideña.
Entre los años 2003 y 2004, algunos comerciantes notaron que muchos de sus consumidores potenciales no podían ir de tiendas durante ese fin de semana por el trabajo y decidieron crear todo un fin de semana de ventas cibernéticas. Actualmente, el Viernes Cibernético es el día de mayor tráfico de compras por Internet de toda la época navideña; seguido por el Lunes Cibernético.
Aunque las ventas récord de estos días no siempre son un reflejo de cómo va a resultar la campaña de Navidad, ninguna compañía puede permitirse no lograr buenas cifras durante este fin de semana, ya que la fecha marca el tono para una temporada en la que se generan en promedio el 40% de las ventas anuales.
Curiosidades del “viernes negro”
El “viernes negro” ya no sólo es una tradición estadounidense. Uno de los días más esperados por comerciantes y consumidores, Black Friday, tiene su origen en Estados Unidos, pero en la actualidad se celebra en varios países del mundo, como Canadá, Brasil, España, Chile, Bolivia, Argentina o México.
Aunque hoy se asocie al mayor día de compras en Estados Unidos, el término “viernes negro” hacía referencia a la crisis de la Bolsa de Valores del siglo XIX. “El adjetivo ‘negro’ se usó durante muchos siglos para retratar diversos tipos de calamidades”, explica el lingüista Benjamin Zimmer, editor ejecutivo del sitio web vocabulary.com.
El “viernes negro” es el día de más compras en EE.UU. desde 2001. La primera vez que se usó el término fue el 24 de septiembre de 1860, cuando Jay Gould y James Fisk intentaron tomar el mercado del oro en la Bolsa de Valores de Nueva York. Cuando el gobierno fue obligado a intervenir para corregir la distorsión mediante el aumento de la oferta de la materia prima en el mercado, los precios cayeron y muchos inversores perdieron grandes fortunas.
La fecha en que se celebra el Día de Acción de Gracias fue determinada en gran parte por los clientes. Desde mediados del siglo XIX hasta comienzos del siglo XX, en una costumbre iniciada por Abraham Lincoln, el entonces presidente fijó el “Día de Acción de Gracias” en el último jueves de noviembre. Pero en 1939 ocurrió algo inusual: el último jueves coincidió con el 30 de noviembre. Los comerciantes preocupados por el corto período de compras que quedaba entre ese día y las fiestas de final de año enviaron una petición a Franklin Roosevelt para que el presidente declarara el inicio de las fiestas una semana antes, lo que fue autorizado.
Los siguientes tres años, el Día de Acción de Gracias, que recibió el sobrenombre de “Franksgiving” (una mezcla de Franklin con Thanksgiving, como se conoce este día festivo en inglés), fue celebrado en días distintos en diferentes partes del país. Posteriormente, a finales del año 1941, por una resolución conjunta del Congreso, el Día de Acción de Gracias sería conmemorado el cuarto jueves de noviembre, garantizando así una semana adicional de compras hasta navidad.
¿Un “gran viernes”? El término “viernes negro” ganó popularidad por primera vez en Filadelfia. Policías frustrados por el tráfico causado por los consumidores en esa fecha empezaron a llamarlo así. A los comerciantes, evidentemente, no les gusta ser relacionados con el tráfico y la polución, así que decidieron rebautizar el día como “viernes grande”, según un periódico local de 1961.
Con el tiempo, el viernes negro pasó a significar “volver al negro”, cuando los comerciantes lograron dar una interpretación positiva al término, al hacer referencia al momento en que los establecimientos volvían a obtener beneficios. No hay pruebas de que esto fuera realmente así, si bien es verdad que el período de fiestas es la parte del año en la que hay mayor volumen de compras.
Aún con todo y el comercio que cada año implica la festividad de Acción de Gracias, para la mayoría de los estadounidenses, reunirse con la familia y los amigos en esta festividad es un motivo por el que vale la pena el ansiado Thanksgiving Day.