(17 de abril del 2020. El Venezolano).- La piedra Kueka, extremadamente valiosa para la comunidad indígena pemón, regresó a Venezuela tras haber estado en Alemania durante 22 años.
La espera terminó este jueves cuando la roca sagrada regresó al país caribeño donde ya le espera “el abuelo”, con el que se reencontrará en una tradición nativa sagrada.
La odisea comenzó bajo la presidencia de Rafael Caldera en 1998, cuando su Gobierno llegó a un acuerdo con el artista bávaro Wolfgang Kraker von Schwarzenfeld, que preparaba una gran instalación en el parque Tiergarten de Berlín y ha comenzado su última fase hoy al llegar al puerto caribeño de Guanta, en el estado Anzoátegui.
En el puerto, unos operarios esperaban la piedra sagrada del pueblo pemón preparados especialmente para la ocasión, pero con el temor latente ante la pandemia del COVID-19. Allí, con equipos especiales, hicieron descender la roca que no había olvidado su patria.
El bloque de jaspe de 30 toneladas terminó así un largo recorrido que inició en mayo de 2018, cuando empezó el proceso de repatriación con un ritual de sanación para el que se desplazaron hasta Berlín un grupo de pemones que desafiaron las bajas temperaturas alemanas con sus vestidos tradicionales.
El pueblo pemón considera que la Kueka forma parte de su acervo cultural y espiritual. Por ello, creen que su regreso reestablecerá el equilibrio ambiental y ecológico quebrantado por la separación de los dos abuelos.
Con información de EFE y El Venezolano Houston