(23 de septiembre del 2020. El Venezolano).- Camila Aqueveque Moreno, una joven zuliana con sueños en el universo y ganas de emprender, es egresada del colegio Mater Salvatoris en la ciudad de Maracaibo , actualmente reside en Argentina.
Aqueveque cursa la carrera de física en la Universidad de Buenos Aires desde el mes de julio, con tan solo 18 años la joven está participando en el Breakthrough Junior Challenge, es un concurso divulgación científica para estudiantes de 13 a 18 años de todo el mundo.
No obstante, en el Breakthrough Junior Challenge compiten 199 países, los cuales a través de videos de 3 minutos o menos de duración explican algunos conceptos sobre física, matemática, ciencias de la vida y el último tema que fue agregado este año que es el COVID-19.
Cabe destacar que el tema de Camila son las Ondas Gravitacionales el cual ha quedado entro los 30 mejores de este años, Camila es la única chica en represetacion de Venezuela, y ha sido evaluado por los cientificos y participantes de la organización Breakthrough Prize
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¿Qué son las ondas Gravitacionales?
Las Ondas Gravitacionales son un fenómeno apenas confirmado en 2015 y anunciado en 2016, desde ahí me he interesado bastante en el tema.
Este fenómeno físico fue predicho por Albert Einstein en 1916 y a penas confirmado en 2015, casi 100 años después. Estas ondas son en realidad una deformación en la forma del espacio, similar a las ondas que se producen en el agua cuando lanzo una piedrita.
Y las deformaciones viajan a la velocidad de la luz sin ser distorsionadas por la materia que atraviesen, y nos puede brindar información sobre el cosmos, la naturaleza del espacio-tiempo, y el inicio del universo mismo.
Se generan por la aceleración de los cuerpos en el espacio, como por ejemplo: un sistema binario de agujeros negros o estrellas de neutrones, la explosión de una estrella (supernova), una estrella de neutrones con irregularidades en su superficie rotando a altas velocidades, o el inicio del universo (llamadas ondas gravitacionales estocásticas).
Lo genial de estas ondas es como si hubiésemos desarrollado un sexto sentido para estudiar el universo: siempre lo hemos estudiado por observación — la vista. Tener a las ondas gravitacionales como recurso es como si a penas, en 2015, hubiésemos empezado a aprender a “”escuchar”” el universo.
Con información de Noticias Al Dia
