(21 de febrero del 2022. El Venezolano).- Arco Minero del Orinoco (AMO) concebido como un modelo de minería responsable, a la cual se pretende denominar “minería ecológica” (¿?), aberración franca que constituye un dislate indiscutible, al norte del estado Bolívar, de unas 11,2 millones de has, con reservas, según estimaciones, de unas siete mil toneladas de oro, cobre, coltán, hierro, bauxita y otros minerales de valor industrial, cuyo riesgo ambiental es elevadísimo por tratarse de un ecosistema tan frágil como el de la Reserva Forestal de Imataca (RFI), con superficie cercana a unos 3,8 millones de has y población de unos 30 mil habitantes; territotio de acervo cultural, así como de recursos naturales extensos, adonde, improvisadamente, sin estudios de impacto ambiental, seha pretendido destinarla para la explotación aurífera, a la cual sería un absurdo denomonarla ecológica porque para toda actividad de tal envergadura se utiliza, inevitablemente, además del barrido de la capa vegetal, cianuro de mercurio Hg (CN)2, de toxicidad extrema y daños irreversibles, bajo supervisión de un aparataje burocrático denominado Ministerio del Poder Popular de Desarrollo Minero Ecológico (MPPDME), Despacho que no debería ignorar la red de pistas ilegales utilizadas para traficar oro y drogas, que bullen en plena orinoquía venezolana, según registros satelitales sobre los estados Amazonas y Bolívar, que han permitido identificar cerca de unos cuatro mil puntos de actividad minera más un complejo de pistas para tráfico de oro y drogas, lo que conlleva un arrase a un ritmo sin precedentes, convirtiéndose en base de operaciones de organizaciones criminales fronterizas, tales como las FARC-EP.
Escrito por Isaías Márquez.
Se encubren unas 42 pistas de aterrizaje desde donde decolan aeronaves cargadas de oro guayanés.
Según las tomas satelitales, una mitad de estas pistas se hallan contiguas a las minas ilegales que energen al sur del río Orinoco.
Buena parte de nuestro oro sale mediante vuelos furtivos, lo que se detecta cuando estos son interceptados en ruta o en destino, lo que se convierte en noticia, ya de rutina. No obstante, existen croquis logrados con apyo de la red de investigaciones de los Bosques Tropicales del Pulitzer Center y la organización noruega Earth Rise Media, que permiten mostrar por primera vez, algunos puntos estratégicos que han establecido las redes de contrabando para sacar, tal vez en complicidad con algunas autoridades, cargamentos ilícitos por vía aérea.