(27 de diciembre del 2021. El Venezolano).- El crucero Carnival Freedom regresó a Miami este domingo después de que un grupo de pasajeros no determinado, dieran positivo a la covid-19, por lo que no pudo atracar en las islas caribeñas de Boanire y Aruba.
El Carnival Freedom, es el tercer crucero en partir de Miami, en reportar casos de covid-19 a bordo en los últimos días, partió de esta ciudad del sur de Florida el 18 de diciembre y se detuvo en Curazao el martes pasado, reseñó EFE.
Sus paradas planificadas en las islas caribeñas de Bonaire, el miércoles, y Aruba, el jueves, fueron canceladas, aunque se le permitió atracar en República Dominicana el viernes, día de Nochebuena.
La cantidad de pasajeros contagiados no ha sido precisada hasta el momento. El barco atracó en Port Miami con 2.497 pasajeros y 1.112 tripulantes a bordo, según la televisión Local 10.
Los pasajeros recibieron una carta de disculpa del capitán del crucero, informándoles de que recibirán un crédito de 100 dólares por habitación y un juego de bingo gratis, detalló el mismo medio.
«La rápida propagación de la variante ómicron afecta la forma en que los destinos responden incluso a una pequeña cantidad de casos«, escribió el capitán del barco en la carta fechada el 22 de diciembre.
El pasado jueves, Royal Caribbean señaló que un total de 55 pasajeros y miembros de la tripulación del Odyssey of the Seas, que zarpó el sábado anterior desde un puerto en Fort Lauderdale, dieron positivo a la enfermedad durante un crucero de ocho días y en el que el 95 % de las personas a bordo tenía la «pauta completa de vacunación».
El anuncio llegó menos de una semana después de que esta compañía informara que 48 personas del barco Symphony of the Seas, señalado como el crucero más grande del mundo, dieran positivo a las pruebas de covid-19 a su retorno al Puerto de Miami tras un trayecto de una semana en el Caribe.
Los cruceros son uno de los sectores más afectados por la pandemia en EEUU Ante la cantidad de contagios registrados a bordo de esos barcos, durante más de un año no pudieron navegar desde puertos del país, lo que ocasionó a las navieras pérdidas millonarias.