(16 de junio del 2020. El Venezolano).- Angustia, desesperación y exceso de velocidad
La detención de uno de los más importantes testaferros de Nicolás Maduro, y en su momento de Hugo Chávez, el delincuente internacional ALEX NAIN SAAB MORÁN, ha provocado una reacción histérica por parte de la narco dictadura.
La cancillería venezolana en un esfuerzo desesperado para proteger al testaferro del narco dictador hizo público un comunicado en el que, en defensa del delincuente, afirma sin rubor alguno que “El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela ha tenido conocimiento de la detención arbitraria del ciudadano venezolano Alex Nain Saab…”siendo que es público y notorio que dicho ciudadano es colombiano [1]. Tal “nacionalización de Alex Nain Saab Morán, ha batido todos los récords de velocidad, superando ampliamente la velocidad que en diciembre de 2015 le imprimió la entonces Asamblea Nacional chavista a la elección de los llamados “magistrados exprés” del TSJ.
II
Interpol no lo puso preso
El segundo desaguisado que encontramos en ese infortunado comunicado, es la afirmación de que “la detención…” la realizó la Interpol. Estos genios que ocupan hoy la cancillería parecen no saber que es Interpol. La, llamada «ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL DE POLICIA CRIMINAL (INTERPOL)». no es una policía, no tiene agentes ni autoridad como institución para detener a nadie. Es una organización internacional que tiene como finalidad servir como instrumento de cooperación y enlace entre las policías para el intercambio de información o requerimientos de cualquiera de los estados miembros. De manera, que a Alex Saab Moran quien lo detiene la Policía de la República de Cabo Verde.
III
¿Un testaferro con inmunidad diplomática?
Seguidamente, el tradicional lenguaje “cantinflero” se hace presente, para argumentar que la detención de Saab Morán fue realizada “…sin tomar en consideración a la inmunidad diplomática que el derecho internacional le concede a un agente de un Gobierno Soberano…”
Estos internacionalista de pacotilla que ocupan la cancillería de la narco dictadura ignoran o parecen ignorar, que las relaciones diplomáticas se encuentran reguladas por la “Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, del 18 de abril de 1961”.
En dicha convención se define lo que se ha dado en llamar la “inmunidad diplomática”, que en realidad se trata de la inmunidad de que goza el agente diplomático frente a la jurisdicción penal, civil y administrativa del Estado Receptor, tal como está establecido en los artículos 31 y 39 [2] de dicha Convención. La inmunidad diplomática solamente se hace efectiva cuando el agente diplomático entra o se encuentra en el territorio del Estado Receptor. Se trata de una condición sine qua non.
No existe inmunidad de ninguna naturaleza para un “…agente de un Gobierno Soberano…” si ese supuesto agente no es un agente diplomático ni se encuentra en el territorio del Estado Receptor ante el cual haya sido debidamente acreditado. Y si no ha sido acreditado en ningún Estado no goza de inmunidad frente a la jurisdicción penal, civil y administrativa de ningún Estado.
De modo que el hecho de que un gobierno califique a una persona como “un agente”, en este caso a Alex Saab, no le otorga a esa persona inmunidad ni diplomática. Si eso fuese posible, los gobiernos podrían investir a cualquier persona con “inmunidad diplomática” en todo el planeta Tierra. Lo raro es que a estos delincuentes no se les haya ocurrido vender esos nombramientos de “agentes del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela” como una especie de patente de corso, a todos los malvivientes del planeta.