(27 de mayo del 2020. El Venezolano).- El distanciamento social se puede catalogar como nulo cuando toca montarse en el transporte público nacional. En Caracas es más que evidente. No se respeta ni el metro no mucho menos. Todos están amontonados.
La falta de unidades empeora el asunto y hace más propensa la propagación del virus que en menos de dos semanas superó los 1000 casos, luego de un crecimiento lento.
En la Avenida Francisco de Miranda, a la altura del municipio Chacao, las personas que abordan los autobuses lo hacen en espacios nivel “chiripa”, mínima disparidad entre ciudadanos.