(13 de mayo del 2024. El Venezolano).- El trágico incidente ocurrido en la tarde del 3 de mayo ha levantado serias interrogantes sobre el uso de la fuerza por parte de las autoridades policiales en Estados Unidos. Roger Fortson, un sargento de la Fuerza Aérea, fue tiroteado seis veces por un agente del sheriff de Florida mientras respondía a una queja sobre una discusión en un apartamento en Fort Walton Beach.
La versión de los hechos presentada por los partidarios de Fortson sugiere que el rápido accionar del agente y su presencia en el apartamento, donde Fortson estaba solo y hablando por FaceTime con su novia, demuestran que se trató de un asesinato injustificado más en una serie de tragedias que involucran a afroamericanos tiroteados por la policía en sus propios hogares. Por otro lado, las autoridades argumentan que el agente actuó en legítima defensa al encontrarse con Fortson sosteniendo un arma al abrir la puerta.
La decisión sobre si se imputarán cargos al agente estará basada en una evaluación exhaustiva de los factores en juego. La proliferación de armas, tanto legales como ilegales, en Estados Unidos, y especialmente en estados como Florida, complica la labor de los oficiales de policía, quienes deben tomar decisiones cruciales en fracciones de segundo.
Expertos en policía han cuestionado si el simple hecho de que Fortson tuviera un arma al abrir la puerta justificaba el uso de la fuerza letal. Ian Adams, profesor de criminología en la Universidad de Carolina del Sur y ex policía, ha destacado la importancia de considerar el comportamiento de Fortson y la información disponible para el agente en el momento de los hechos, reportó The Sun Sentinel.
El video de la cámara corporal del agente, publicado recientemente por el sheriff del condado de Okaloosa, muestra un encuentro tenso. El agente golpea la puerta de Fortson y, al recibir respuesta, dispara sin previo aviso, impactando a Fortson seis veces antes de ordenarle que soltara su arma.
El sheriff Eric Aden ha defendido la actuación del agente como legítima defensa, mientras que los abogados de la familia de Fortson insisten en que el agente se equivocó de apartamento, ya que Fortson estaba solo y no representaba una amenaza.
Este incidente ha reavivado el debate sobre el uso de la fuerza por parte de la policía y la necesidad de reformas en el sistema de justicia penal. El aumento en la posesión de armas ha planteado desafíos adicionales para los agentes, quienes enfrentan riesgos constantes en un entorno donde las armas son omnipresentes.
La investigación sobre este caso sigue en curso a cargo del Departamento de Aplicación de la Ley de Florida. Mientras tanto, la comunidad espera respuestas claras sobre las circunstancias que rodearon la trágica muerte de Roger Fortson y sobre cómo podemos avanzar hacia una aplicación más justa y equitativa de la ley en nuestro país.