(2 de julio de 2019. El Venezolano).- El asesinato del capitán Rafael Acosta Arévalo es el preludio de una escalada de violencia mucho mayor. Recuerda al asesinato de Fernando Albán, cometido por un régimen que aplica el terrorismo como política de Estado, alertó el diputado de la Asamblea Nacional (AN), José Luis Pirela.
«Evidentemente, el crimen del capitán Acosta es un crimen con un objetivo claro: intimidar y acorralar a la reserva moral de la Fuerza Armada Nacional (FAN) y a la dirigencia política democrática», dijo el parlamentario este martes durante la sesión ordinaria.
A su juicio, «es infeliz que el homenaje que Jorge Rodríguez le haga a su padre, asesinado por esbirros, sea convertirse en el celestino de la tortura. Se supone que alguien que haya vivido el tremendo dolor de ver a un padre luchar y morir por esas ideas, el homenaje que le haga sea convalidar las prácticas por las que fue asesinado su padre».
El diputado solicitó una investigación internacional contra el general Iván Hernández Dala, responsable de la Dirección General de Contra Inteligencia Militar (Dgcim). También incluyó al mayor Alexander Granko y al coronel cubano Eliader Martínez, a quien calificó como el jefe de la tortura en Venezuela. «Aquí, cubanos, rusos e iraníes torturan a civiles y militares venezolanos«.
TIAR
Pirela, en nombre de la fracción parlamentaria 16J a la que pertenece, exhortó al presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, a que se defina el tema del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) porque «hace semanas se declaró la urgencia parlamentaria y eso no puede prolongarse, son seis semanas».
«La Fracción 16J tenemos 18 semanas insistiendo en la activación del 187.11. La respuesta más común es que si lo aprobamos y no viene nadie, ¿qué haremos? Es un argumento pobre«, señaló
