(22 de septiembre del 2020. El Venezolano).- El presidente de Irán, Hasán Rohani, ha denunciado este martes las sanciones impuestas por Estados Unidos contra el país pero ha insistido en que Teherán las superará, al tiempo que ha recalcado que el Gobierno que surja de las presidenciales de noviembre en el país norteamericano «no tendrá otra opción que rendirse ante la resiliencia» iraní.
«No somos una moneda de cambio en las elecciones estadounidenses y en la política interna y cualquier Administración estadounidense tras las próximas elecciones no tendrá otra opción que rendirse ante la resiliencia de la nación iraní».
Rohani ha manifestado durante su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas que «Estados Unidos no puede imponer negociaciones ni una guerra a Irán» y ha agregado que, si bien «la vida es dura bajo las sanciones, más dura es la vida sin independencia».
«La libertad política en Irán es importante. Nosotros, como la democracia más antigua en Oriente Próximo, estamos orgullosos de que nuestro pueblo defina su destino y no cambiaremos la libertad interna a través de las interferencias extranjeras», ha argumentado.
Así, ha criticado las sanciones estadounidenses en un momento en el que el país hace frente a la pandemia de coronavirus. «Mi nación (…) en lugar de disfrutar de cooperación internacional, hace frente a las sanciones más duras impuestas en la historia en violación clara y flagrante de la Carta de la ONU».
Rohani ha comparado además la actitud de Estados Unidos hacia Irán con la muerte de George Floyd a manos de la Policía de Minesota. «Instantáneamente reconocimos el pie presionando el cuello como el pie de la arrogancia en el cuello de las naciones independientes», ha manifestado.
En este sentido, ha defendido el papel de Irán en la región y ha agregado que «una nación así no merece sanciones». «La respuesta a la paz no es la guerra. El premio a la lucha contra el extremismo no son los asesinatos», ha dicho.
El presidente iraní ha hecho así una velada referencia a la muerte del jefe de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria, Qasem Soleimani, quien coordinaba la lucha contra Estado Islámico por parte de Teherán, en un bombardeo ejecutado por Estados Unidos en enero en la capital de Irak, Bagdad.
ACUSACIONES CONTRA EEUU
Por otra parte, ha acusado a Estados Unidos de utilizar argumentos falaces para justificar sus operaciones en Oriente Próximo, citando entre sus ejemplos la invasión de Irak «para luchar contra Sadam Hussein, el mismo monstruo al que crearon, cultivaron y financiaron en su guerra contra Irán, al que dieron armas químicas».
«Presumen de la lucha contra el terrorismo y Estado Islámico cuando ellos mismos crearon esta red terrorista. Ahora tienen la audacia de esperar gratitud regional a este comportamiento», ha lamentado, al tiempo que ha rechazado las acusaciones contra Irán sobre supuestos planes para hacerse con armas nucleares.
«Esto lo hacen mientras tienen la infamia de ser el único que ha utilizado armas nucleares en la historia de la humanidad y cuando el único que posee armas nucleares en Oriente Próximo –en referencia a Irán– gestiona su teatro sobre la no proliferación», ha señalado.
En este sentido, Rohani ha recordado que Estados Unidos «está implicado directamente, junto a sus cómplices regionales, en todo caso de ocupación, guerra y agresión, ya sea en Palestina, Afganistán, Yemen, Siria, Irak, Líbano, Sudán o Somalia».
«Aún así, culpan a Irán de sus propias derrotas inevitables a la hora de hacer frente a la voluntad de la población de la región. Han vendido cientos de miles de millones de dólares en armas a sus clientes, convirtiendo nuestra región en un polvorín, mientras intentan en vano privar a Irán de sus requisitos mínimos de defensa», ha manifestado.
En esta línea ha dado las gracias al Consejo de Seguridad de la ONU por rechazar el «ilegal» intento de Estados Unidos de reimponer sanciones a Irán una vez expire el embargo de armas en octubre. «Es una victoria no sólo para Irán, sino para la comunidad internacional», ha zanjado.
A pesar de ello, el Gobierno de Estados Unidos anunció el sábado la imposición de sanciones de forma unilateral acogiéndose al conocido como mecanismo ‘snapback’, incluido en el acuerdo nuclear de 2015 que Washington abandonó en 2018.
Las tensiones entre Washington y Teherán han aumentado desde que Estados Unidos se retirara del acuerdo nuclear y repuntaron en enero después de que el Ejército estadounidense matara en un bombardeo en Irak a Soleimani.