(10 de junio del 2020. El Venezolano).- Una pregunta: de donde salió la actual ” Marea Roja ” Latinoamericana de las izquierdas, Lula da Silva, Chávez, Kirchner, Evo Morales, Tabaré Vázquez, López Obrador, etc?
Respuesta: del Foro Social Mundial de Sao Paulo, un encuentro anual contra la economía libre y a favor del Socialismo a nivel global. El primer foro, en el 2001, fue en Porto Alegre, Brasil, organizado por el Partido de los trabajadores de Lula da Silva y en coordinación con Fidel Castro, el dinero salió de las alcaldía de la izquierda y de un grupo de la izquierda francesa, liderado por el socialista franco – español Ignacio Ramonet. Hubo 12. 000 asistentes de todo el mundo. En los siguientes más numerosos cada vez, hablaron el célebre Noam Chomsky, citado por Chávez en la ONU. El cuarto foro fue en la India, en el 2004 en Mumbai, más de 75000 personas, y habló el igualmente célebre Joseph Stiglitz,, luego volvió a Brasil, después en Caracas en el 2006, habló Chávez por supuesto.
Otra pregunta: hay algún foro Mundial en favor de la economía libre y contra el socialismo?
Respuesta: no lo hay todavía con el apoyo decidido de los partidarios del capitalismo de libre mercado y del Primer mundo. Por eso la izquierda predomina y el socialismo se impone, porque no hay contrapeso, freno ni contención.
Mientras no cuestionemos el sistema no vamos a salir de este régimen socialista tan fácilmente. Hay que desafiar al socialismo y cuestionar el sistema.
La Marea Roja socialista y el neo comunismo latinoamericano avanzan, y rotundamente. El eje la Habana-Caracas, se le añaden los demás países y nos pone en una situación peor todavía que en los años 70 cuando Salvador Allende en Chile, Velazco Alvarado, Perón y los “Montoneros”. Porque ahora, a los gobiernos Comunistas izquierdistas se le han sumado en las ofensiva global contra las economías libres y el capitalismo, numerosos grupos irregulares de izquierda, como el narcotráfico, las FARC, terrorismo, Hezbolá, teología la liberación, Estado profundo, etc. Existe una nueva estrategia y muy peligrosa, y no hay contención eficaz en nuestro país. La cultura de la izquierda ha sido hegemónica, y los partidos políticos inicialmente no socialistas han sido infiltrados de contenidos socialistas, o vaciados de todo contenido.
En Venezuela la soberanía nacional se perdió. Venezuela es una nación ocupada por grupos irregulares y países enemigos de Occidente, de las economías libres y en particular de los Estados Unidos de América.
Los liberales no compartimos el Socialismo del siglo XXI, para nada. Porque es el mismo socialismo de siempre, con algo de ropa nueva. Pero no por eso dejamos de tomarlo en serio. Como no tomar en serio un Régimen o Gobierno cuyo dominio de Venezuela es tan fuerte que se ha atrevido a desafiar a la nación que más ha defendido la libertad en el mundo, como lo es los Estados Unidos de América.
Ahora el socialismo renovó su vestuario y estrategias. La nueva izquierda reemplazó a Lenín por Gramsci. Y a Marx por Jesucristo (un falso Jesucristo) pero la gente no lo sabe ni le interesa mucho, o Mahoma. Y el antiguo obrerismo y campesinismo anticapitalista y antiimperialista se vistió a la moda “políticamente correcta”: globalofobia, ecologismo, feminismo, neomilitarismoe indigenismo, con bastante posmoderno y Nueva era. Eso es muy serio. Se montó sobre los fracasos del mal llamado “neo” Liberalismo.
Por eso las viejas fuerzas políticas vestidas de neoliberalismo han sido incapaces de detenerlo. En Perú la vieja izquierda con Alan García y un APRA vestidos de neoliberales no pudieron. En México también sucumbieron con López Obrador.
Venezuela necesita recuperar sus instituciones para hacer un cambio para mejor, no para peor. Un cambio de régimen, y no sólo de Gobierno o de constitución. Des estatización. Necesita privatizaciones abiertas y masivas. Competitivas, y sin tanta complicación. No para capitalizar al Estado o hacer monopolios privados, sino para capitalizarnos a los venezolanos. Y tener una economía más racional y eficiente.
Y si el petróleo es nuestro, deberían ofertarnos acciones de las empresas petroleras. Hay que desreglamentar, para devolver a los particulares facultades y atribuciones arrebatadas por el socialismo. Hay que derogar todas las leyes malas. Hay que poner al Estado en su lugar. Mientras más abierta y libre es una sociedad, hay más cooperación productiva, más movilidad social, más eficiencia económica, y pocos conflictos políticos, intercambio y riqueza para todos. Necesitamos un cambio de dirección y Rumbo, no sólo de personas o grupos, un cambio radical.
La Revolución es un falso cambio. Con frecuencia son guiadas por la envidia, disfrazadas de compasión.
La izquierda no permite ni deja recuperar las instituciones, por el contrario las destruyen. Es imposible enfrentar al socialismo siendo socialistas en mayor o menor medida, pero tampoco podemos dejar en manos de periodistas, y medios de comunicación, actrices y actores, empresarios mercantilistas, o personas inexpertas con ideas confusas. Sin mensaje. Los veteranos de izquierda y sin escrúpulos de ninguna naturaleza en el poder, saben muy bien lo que hacen, y están dispuestos a todo. Por eso ha mandado la izquierda. La lucha tiene que ser para lograr una sociedad y economía libre. Ese es el gran desafío. Lo vamos a ganar porque estamos del lado del bien. El cambio es inevitable y aún cuando muchos tengan dudas es pronto. Dios Bendiga a Venezuela.
Néstor Suárez es Economista, Msc y Phd en Economía