(06 de enero del 2025. El Venezolano).- En algunos casos se escucharon truenos, se vieron relámpagos y, tal como advertían los meteorólogos, llovió, pero los Reyes Magos cumplieron con su cometido histórico y su mágica misión y han llegado a todas partes la tarde del 5 de enero. Aunque en algunos lugares como Zamora, un repentino aguacero transformó la visita en una más corta de lo previsto. También se minimizó el itinerario en ciudades de Castilla-La Mancha.
Las cabalgatas, como es tradición y salvo casos puntuales como este, han pintado el día de color por mucha nube que amenazara el cielo. Desde primera hora de la mañana, con los recibimientos oficiales y las llegadas más inesperadas y llamativas (barco, tren, helicóptero, esquís) hasta última hora de la tarde, con los caramelos repartidos y los deseos recogidos.
Los trajes de los Reyes Magos de Paiporta se salvaron porque estaban guardados en las plantas altas del Auditorio; las bajas aún presentan daños. Gracias a eso, hoy sus majestades han podido lucirlos de nuevo en una cabalgata muy especial, indica RTVE.
Paiporta fue una de las localidades más afectadas por la dana que azotó la Comunidad Valenciana el pasado 29 de octubre y hoy el desfile ha tenido como protagonistas al pueblo, las asociaciones vecinales y los voluntarios que ofrecieron su ayuda tras la catástrofe. Los mayores aplausos se los ha llevado un camión de la UME.
Otras localidades de la Huerta Sur han vivido una cabalgata conjunta, organizada por las Cámaras de Comercio, y han repartido juguetes, turrones y dulces entre los niños y niñas de Llocnou de la Corona, Sedaví, Benetússer, Alfafar, Massanassa, Catarroja y Albal.
Los reyes silencian la lluvia en Madrid
La tarde había empezado con un buen chaparrón pero el desfile pudo salir puntual, a las 18:00 h. y con el cielo despejado ya hasta el final. La de Madrid es la cabalgata de las cifras más abultadas: 1.200 kilos de caramelos, 1.500 personas en la comitiva real y 260 pajes reales.
El espectáculo ha estado dedicado a tres elementos naturales. El Rey Melchor, ataviado de azul, ha representado el agua, montado sobre un navío rojo y dorado y rodeado de criaturas marinas. Gaspar, vestido de rojo sobre un pájaro batiendo las alas, ha representado al aire, rodeado de estrellas. Y Baltasar, de verde, ha simbolizado la tierra y el conocimiento de los mayores.