(25 de julio del 2024. El Venezolano).- La primera dama Jill Biden vio este miércoles por la noche cómo el presidente Joe Biden decía al pueblo estadounidense que había llegado el momento de «pasar la antorcha» de su carrera política. Después se subió a un avión, voló casi 6.000 kilómetros hasta París, donde se pasaba otra antorcha.
Jill Biden llega a París en un momento monumental para la presidencia de su marido. Al subir a su avión momentos después de que el presidente se dirigiera a la nación desde el Despacho Oval, el papel de la primera dama pasó rápidamente de ser el de una activa y prolífica sustituta a convertirse en una líder a contrarreloj hacia la inauguración de una nueva administración.
Biden se embarca ahora en una gira de «pendientes» en el cargo, empezando por su segundo y último viaje para animar a los atletas estadounidenses en los Juegos Olímpicos como primera dama.
El viaje, que se estaba preparando desde mucho antes de que el presidente suspendiera su campaña de reelección, marcará la forma en que se recordará su papel en el país y en el mundo.
Es un legado que ya dejó entrever en 2021 cuando viajó con el presidente a la cumbre del G7. «Siento que soy una compañera en este viaje de curación, de unión, de unidad», dijo Biden a los periodistas.
Esa unidad se exhibirá en los Juegos Olímpicos, un momento poco frecuente en tiempos intensamente polarizados.
«La primera dama está entusiasmada por acudir a los Juegos Olímpicos, donde estamos todos estamos unidos como país en apoyo de un equipo: Team USA», dijo su portavoz, Vanessa Valdivia, en un comunicado.
Se espera que Biden, a quien su oficina describe como una ferviente aficionada al deporte, salude a los atletas olímpicos y a sus familias durante el viaje, y representará a EE.UU. en la ceremonia de apertura. También animará al Equipo de EE.UU. en «varios eventos olímpicos», dijo su oficina, reseñó CNN