(19 de septiembre del 2019. El Venezolano).- Un grupo de más de 150 venezolanos indocumentados fueron expulsados este jueves de Perú tras haber sido interceptados por las autoridades peruanas después de que hubiesen cruzado de manera ilegal la frontera con Ecuador, anunció la Superintendencia Nacional de Migraciones.
Los venezolanos fueron devueltos a Ecuador con una prohibición de ingreso a territorio peruano por 15 años al haber transgredido la Ley de Extranjería.
La intervención de los inspectores de Migraciones junto a un contingente de la Policía Nacional se realizó en la Carretera Panamericana, solo 15 kilómetros de distancia de la frontera con Ecuador, informó EFE.
Allí revisaron las documentaciones de todos los pasajeros que viajaban en vehículos colectivos rumbo al sur, la ruta que utilizan la mayoría de venezolanos para llegar a Lima o a otros países vecinos.
La jefa de Migraciones en la región norteña de Tumbes, Lita Orrego, precisó que las acciones de control y fiscalización continuarán junto a la Policía Nacional en los próximos días para garantizar la seguridad interna del país.
El operativo se realizó casi dos semanas después de la aparición en Lima de los cuerpos descuartizados de un peruano y un venezolano, un crimen presuntamente realizado por una banda de venezolanos dedicada aparentemente a la venta de drogas.
Trascendió después que el venezolano víctima de este crimen, identificado como Rubén Matamoros, había ingresado a Perú de manera ilegal después de que las autoridades peruanas lo hubiesen deportado meses atrás por haber ocultado sus antecedentes penales para obtener el permiso de residencia.
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En este año el Gobierno peruano ha deportado en cuatro vuelos con destino a Venezuela a unos 200 venezolanos que ocultaron su prontuario.
Perú es el segundo país que más venezolanos ha recibido por la crisis que atraviesa Venezuela, con 866.000 llegados en los últimos tres años.
En 2016 el Gobierno peruano abrió la frontera a todos los venezolanos, a los que les otorgaba un Permiso Temporal de Permanencia que les permitía trabajar y estudiar, pero paulatinamente fue restringiendo el acceso hasta exigir visado desde junio de este año.
