(18 de octubre del 2020. El Venezolano).- El ex juez español Baltasar Garzón, que encabeza la defensa de Alex Saab, volvió a declarar sobre el tema de su cliente y en este caso, la contundencia sobre sus apreciaciones son tajantes. El abogado, insiste que Saab se encontraba en misión especial como agente diplomático para garantizar el acceso a la ayuda humanitaria, y a los bienes esenciales, que el bloqueo económico norteamericano le niega al pueblo venezolano.
Dice que aunque viajaba con poderes del país suramericano para negociar la ayuda, fue detenido en Cabo Verde a petición de las autoridades norteamericanas.
“Es público y notorio que Estados Unidos mantiene una batalla diplomática abierta contra Venezuela, con la exclusiva finalidad de derrocar al gobierno de Nicolás Maduro”, dice al tiempo que expresa que por ello ha violentado las garantías del derecho internacional, tanto que aprobó sanciones económicas unilaterales, e incluso, ha procesado judicialmente al Presidente del país, Nicolás Maduro. Todo vale para lograr el objetivo diplomático, tumbar al gobierno enemigo”, afirma. A lo que agrega que en este orden, Alex Saab es una pieza más de la batalla de ajedrez diplomático que mantiene Norteamérica”.
El ex juez da cuenta que “en una batalla sin reglas en las que el gigante arrasa con todo el ordenamiento jurídico internacional, Saab se atrevió a articular un sistema de canalización de ayuda humanitaria y bienes básicos hacia Venezuela” y que estados Unidos no perdonó tan acción.
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Según la defensa, el derecho internacional es tajante al establecer las prerrogativas que asisten a los agentes diplomáticos y que éstas son claras: un país no puede desplegar una persecución contra agentes en el extranjero de otro Estado, en el marco de un conflicto diplomático entre ambos. Garzón dice que esto es justamente lo que está sucediendo, porque el proceso de extradición se articuló sin contar con un tratado bilateral de extradición con Cabo Verde que se encuentra huérfana de vehículo procesal para tramitarla.
Garzón asegura que mientras tanto, Saab está en condiciones infrahumanas de detención y que “su estado de salud es preocupante, al tiempo que funcionarios que le habrían visitado en prisión, coaccionándolo para que acepte la entrega, forzándole a declarar contra el presidente de Venezuela y, “como él mismo ha relatado a su defensa, le habrían golpeado repetidamente, en prácticas que nos recuerdan a la forma de actuar en Iraq y Afganistán de algunos funcionarios norteamericanos”.
Ante este panorama, Garzón dice que dadas “estas condiciones de detención arbitraria, negación de premisas diplomáticas, artificios de extradición, y torturas, tratos inhumanos y degradantes, solo podemos afirmar que Alex Saab está secuestrado”.
Cierra sus contundentes declaraciones afirmando que “respetamos la independencia judicial de las autoridades judiciales de Cabo Verde, pero en aras al ejercicio fundamental de derecho de defensa, exigimos el respeto a los derechos de un agente especial como Alex Saab, que, cuando menos, debería estar en libertad y debidamente protegido por las prerrogativas diplomáticas que le corresponden. La transparencia sobre lo que está ocurriendo en Cabo Verde, y los intereses que se ocultan de EEUU con este caso es fundamental para la salvaguarda del estado de derecho”.
Con información de Nota de Prensa