(26 de agosto del 2020. El Venezolano).- La destrucción social y económica que ha propiciado el régimen de Maduro, condujo a un éxodo sin precedentes en la Región Latinoamericana, con 5,7 millones de migrantes venezolanos.
¡Un drama humanitario! El capital más preciado del país, nuestra gente, decidió cruzar fronteras, dejando atrás sus sueños, sus familias, su tierra, empujados por una política de destrucción del país, enarbolada por los delincuentes y cómplices del socialismo del siglo XXI.
No es justo que los venezolanos tengan que padecer maltratos, una xenofobia creciente y violencia, por culpa de quienes se dedicaron a robar un país y repartirlo como botín, lo que obligó a emigrar a millones.
Dirigentes insensibles que acabaron los sueños de muchos. ¡Inaceptable!
No es posible que siga siendo nuestro pueblo quien se vaya.
No es posible tanto sufrimiento y muerte de nuestra gente abandonada a su suerte en los países.
El responsable de esta tragedia es el régimen, son quienes deben irse.
Venezuela debe reunificarse.