(26 de febrero del 2021. El Venezolano).- El ingeniero civil y experto en servicios públicos José Norberto Bausson alertó que en la actualidad se bombea solo el 40% del agua que se distribuía hace 25 años en Venezuela, que de acuerdo la capacidad instalada de las hidrológicas en el país, se enviaba 140.000 litros por segundo y hoy en día solo se distribuyen 60.000 litros por segundo.
«Esa es una catástrofe de las empresas públicas porque todas esas instalaciones existían y eran sistemas de gran envergadura, calidad, embalses grandes, sistemas de bombeo, plantas de tratamiento y toda esa infraestructura esa capaz de distribuir al territorio nacional los 140.000 litros de agua», denunció en Fedecámaras Radio el miércoles 24 de febrero.
Resaltó que en el pasado, Venezuela ostentaba una «gigantesca» estructura hidrológica para satisfacer las necesidades del recurso a la población y que cada una de las empresas estatales tenían la capacidad logística para hacerlo posible, pero que el servicio ha mermado considerablemente porque muchos de los empleados se han tenido que ir debido a los bajos sueldos que están devengando.
“Ahora prácticamente la gente anda a pie en las hidrológicas y aparte de eso ya el personal se ha ido retirando de las empresas porque ya no forma de vivir con el sueldo que reciben”, subrayó.
Las declaraciones del ingeniero Bausson sobre el suministro de agua en Venezuela coincide con las iniciativas que se han estado llevando a cabo desde hace varios meses por particulares y por autoridades municipales para abrir pozos profundos y subsanar así los problemas de distribución de agua. Tal es el caso del alcalde de Chacao, Gustavo Duque, que lidera un programa con esta iniciativa para dar respuesta al mal servicio de Hidrocapital en toda la jurisdicción.
En 2020, el Observatorio Venezolano de los Servicios Públicos (OVSP) indicó que 75,6% de los venezolanos calificó de forma negativa el servicio de agua. En ciudades como Barquisimeto y Caracas reportaron que apenas reciben el agua por tubería tres veces por semana; mientras que en Maracaibo y Porlamar señalaron recibir el servicio cada 15 días o un mes.
La administración de Nicolás Maduro oficializó en 2014 el racionamiento del servicio de agua a través del llamado «Plan de Abastecimiento» producto, según la versión oficial, de los «críticos» niveles de las lluvias.
Siete años han transcurrido, mucha lluvia ha caído desde entonces y la situación del suministro de agua es cada vez es peor en todo el país.
«El servicio de agua potable en toda Venezuela sufre uno de sus momentos más terribles por la mala calidad del servicio y el sufrimiento que se infringe en la población, especialmente a las familias más humildes y a aquellos pacientes que están recluidos en los hospitales donde, en su mayoría, no hay agua», asegura José María De Viana en una entrevista para TalCual.