(01 de noviembre del 2020. El Venezolano).- La justicia tardía, no es justicia. La expresión es muy apropiada para lo que sucede con los oficiales acusados de fraguar el llamado “Golpe Azul”, quienes no fueron liberados hace un año pese a que ya tenían una boleta de excarcelación. Después de permanecer más de un año secuestrados en una cárcel militar fueron puestos en libertad recién este 30 de noviembre 2020. Se trata de los pilotos teniente (Av) Petter Alexander Moreno Guevara y primer teniente (Av) Luis Hernando Lugo Calderón así como el capitán (GNB) Carlos Luis Jiménez Alfonzo, del llamado “Golpe Fénix”.
La liberación es la respuesta de Nicolás Maduro a la presión del informe de la Misión de Determinación de los Hechos que ordenó la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. Hay que destacar que por otra parte están los delegados de la Alta Comisionada Michelle Bachelet, entre ellos José María Aranaz quien llegó al país hace varios días y que ha sido pieza clave para que en la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) y en el Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN) se haya ideado como estrategia llevar a los detenidos una vez a la misa, otra a un patio, también que se reanudaran las visitas y que todo eso fuera grabado para contrarrestar el informe de la Misión.
Castigado tras las rejas
Moreno Guevara cumplió la totalidad de su condena, de cuatro años y siete meses, el 20 de octubre 2019.
Maryluz Guevara, madre del joven teniente, dijo hace un año que “el juez no quiere llevar la boleta de excarcelación” y la Corte Marcial no les quiso dar explicación alguna. “Como madre, me siento impotente por no saber qué hacer por la libertad de mi hijo”.
Si algo quedó claramente demostrado, en el caso de Moreno Guevara y del 1Tte Ricardo José Antich Zapata, es que la administración de justicia no respeta acuerdos ni siquiera cuando usan a los militares para que declaren contra sus compañeros.
Los cinco tenientes detenidos por el Golpe Azul fueron: Henry Salazar, Luis Lugo, Carlos Esqueda, Peter Moreno y Ricardo Antich.
El 12 de febrero de 2015 Moreno y Antich fueron detenidos y fungieron como testigos de excepción y, en una prueba anticipada, rindieron testimonio en contra de sus compañeros.
Les dijeron que regresarían a su componente y el 19 de febrero del 2015 quedaron en libertad. Se presentaron a buscar el oficio para presentarse a su comando, pero les anunciaron que están incursos en instigación a la rebelión y contra el decoro militar; de una vez los llevan a los tribunales militares donde son imputados y luego recluidos en la Dgcim, hasta que fueron presentados el 20 de marzo.
En las redes y medios del Gobierno los identificaron como integrantes de un plan que pretendía usar un avión Tucano para derrocar a Nicolás Maduro a través de un Golpe de Estado que se iniciaría en la Base Aérea Libertador.
El juicio se inicia el 21 de diciembre de 2015, luego de un año y dos meses son sentenciados a 9 años, 8 meses y 21 días, decisión que fue apelada y se las aprueban, por lo que cuando tenían tres años y cuatro meses presos van a un nuevo juicio.
Moreno y Antich deciden reconocer los hechos para acortar el tiempo y salir en libertad, por lo que son sentenciados a 4 años, 7 meses y 21 días. Lugo Calderón fue condenado a cuatro años, nueve meses y diez días el 22 de noviembre 2019, pero siguió preso hasta ayer 30 de noviembre.
Si regresamos al juicio, el 11 de octubre de 2018, el Capitán de corbeta Pedro Alexander Lunar Rodríguez, juez militar segundo de ejecución de sentencias, ordena la libertad de los primeros tenientes, una vez que les computa la pena por horas de trabajo y estudio; unas horas después comisiones del Sebin y Dgcim allanaron simultáneamente sus viviendas, deteniendo nuevamente a Moreno Guevara; Lugo huye, pero es detenido días más tarde, mientras que Esqueda y Antich salen del país.
Pasó un año y cumplida la pena completa, el juez Bustamante Prieto le dice a Peter Moreno en la cárcel de Ramo Verde que en unos días le traería la boleta de excarcelación. El director de la cárcel llama al juez ese día y le responden que en un rato llega a Ramo Verde.
Al día siguiente el presidente de la Corte Marcial, M/G Edgar José Rojas Borges, promete a los familiares que a las 6 de la tarde estarían en libertad, recomendándoles que se fueran a esperarlos en la salida de la cárcel militar. Era mentira, Rojas Borges nunca más contestó mensajes ni aceptó recibirlos.
Gloria Calderón madre de Lugo Calderón solicitó recientemente ante el Tribunal Primero de Ejecución, a cargo de la capitana María Victoria Jaspe, que entregara la boleta de excarcelación en Ramo Verde.
Es así como Peter Moreno, quien debió salir el 22 de noviembre 2019, y Lugo Calderón, que cumplió pena el 20 de octubre 2019, permanecieron más de un año secuestrados en Ramo Verde, sin que los delegados de la Alta Comisionada de Derechos Humanos, Michelle Bachelet, se pronunciaran.
Por el Golpe Azul aún queda detenido el primer teniente (Av) Henry Javier Salazar Moncada, quien está preso desde el 12 de febrero 2015, a quien acusaron por Instigación a la Rebelión y Contra el Decoro Militar.
El capitán Jiménez
Por el llamado Golpe Fénix solo quedaban dos oficiales detenidos: los capitanes (GNB) Jesús María Alarcón Camacho y Carlos Luis Jiménez Alfonzo, ambos detenidos en noviembre 2015. Cinco años después, ayer 30 de noviembre 2020, fue liberado el segundo de ellos.
Jiménez era Comandante de la Tercera Compañía, parroquia El Recreo, del Destacamento Sur del Distrito Capital de la Guardia del Pueblo en Caracas, cuando fue detenido el 23 de noviembre de 2015.
Es investigado en la causa Nro CG-IG-J-AJ:0014-16, del 19 de febrero 2016, junto con Alarcón Camacho y Pablo José Molina Gil. ¿El delito? “Propalar noticias en perjuicio del buen orden civil o militar o del buen nombre de la profesión y por Inmiscuirse en cualquier forma, en asuntos políticos o religiosos, según el Reglamento de Castigos Disciplinarios Nro. 6”.
Hay que resaltar que Alarcón Camacho, quien fue condenado a 7 años 7 meses, y quien permanece detenido en Ramo Verde, era comandante de la 2da compañía del destacamento 20012 y Comando de Zona 12 en el aeropuerto de Barquisimeto. Molina Gil salió en libertad el 8 de noviembre 2018.