(24 de abril del 2020. El Venezolano).- La primera ronda del sorteo universitario de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) regaló todo el protagonismo a dos jóvenes mariscales de campo, Joe Burrow, y Jordan Love.
Fue el primer sorteo universitario en la historia de la NFL que se realizó de forma telemática por causa de la pandemia del coronavirus.
Burrow, de 23 años, cumplió con todos los pronósticos al ser elegido número uno por los Bengals de Cinncinati, que ya lo presentan como su jugador franquicia.
El comisionado de la NFL, Roger Goodell, desde su domicilio, dio a conocer la elección de los Bengals, el equipo con la peor marca durante la temporada del 2019. Nada más conocerse la elección, el dueño de los Bengals, Mike Brown, a través de su cuenta de Twitter dio la bienvenida a Burrow, quien vestirá la camiseta con el número 9.
“Todos estamos felices de haber podido conseguir tu selección y convencidos que formarás parte de equipos de los Bengals que luchen por el título de campeones durante muchos años”, destacó Brown, quien ya el miércoles, en carta personal enviada a Burrow, le daba la bienvenida. También envió al jugador y a sus padres la camiseta con el número 9 que va a vestir a partir de esta temporada.
Aunque el sorteo estaba programado originalmente celebrarse en Las Vegas (Nevada) se ha tenido que realizar de forma virtual, por lo que todo fue más impredecible que cuando se realizaba con la presencia de los jugadores y el personal de los equipos en el mismo recinto.
Goodell en el transcurso de la primera ronda anunció que Las Vegas será la sede de la edición 87 del sorteo de la NFL en el 2022, con los mismos planes de los que estaban previstos para el de este año en el espectacular hotel Fountains of Bellagio.
Si Burrow cumplió con los pronósticos, al igual que ala defensivo Chase Young, de Ohio State, como número dos elegido por los Redskins de Washington, y su compañero de universidad, el esquinero Jeff Okudah, que se fue como tercer seleccionado por los Lions de Detroit, la sorpresa positiva de la noche fue Love.
La dieron los Packers de Green Bay al conseguir con el número 26 al primer mariscal en un sorteo universitario desde el 2005, cuando consiguieron al estelar Aaron Rodgers.
Love, de 21 años, formado con los Aggies de Utah State, fue el cuarto mariscal de campo que salió elegido en la primera ronda del sorteo. Después de la elección de Burrow, el siguiente mariscal de campo elegido en el sorteo fue Tua Tagovailoa, de 22 años, de la Universidad de Alamba, seleccionado con el número cinco por los Dolphins de Miami.
A Tagovailoa le siguió otro pasador, Justin Herber, de 22 años, formado con los Ducks de Oregón, quien se llevaron los Chargers de Los Angeles con el número seis. Entonces, los Packers aguardaron pacientes hasta que llegó su turno con el número 26 y consiguieron a Love, quien como universitario culminó la temporada del 2018 con 3.567 yardas aéreas y 32 pases de anotación por únicamente seis intercepciones, lo que colocó al pasador en el radar de los seguidores de talentos de la NFL. Sin embargo, esos números contrastaron dramáticamente con los que tuvo en el 2019, cuando lanzó 20 pases de anotación, pero también 17 intercepciones, la peor marca en su grupo de la FBS.
Pero todos los analistas coincidieron en considerar a Love como uno de los pasadores con más futuro de los presentes en el sorteo, aunque también el que más necesita ser pulido en su juego, objetivo que quieren conseguir los Packers.
Ahora Love se une a un equipo dirigido por el entrenador en jefe Matt LaFleur, especialista en desarrollar talento joven, y a Rodgers, de 36 años, que puede ser su maestro perfecto en las próximas temporadas, si asume que el momento de la transición ya ha comenzado dentro del puesto que ocupa y en el que ha sido intocable.
Hace 15 años, los Packers también consiguieron a Rodgers con la selección número 24 de la primera rond, y desde entonces nunca se habían vuelto a fijar en un mariscal de campo de calidad y proyección de futuro.
Con información de EFE