(15 de abril del 2020. El Venezolano).- La melodía de Venezuela y el ritmo de la balada corren por sus venas desde bien temprano cuando, desde los siete años, su casa se convierte en un lugar de encuentro de grandes figuras venezolanas y personalidades de todo el espectro musical. La bohemia de la música romántica comenzaba a penetrar alcanzando su corazón de manera paulatina.
Fue a los 17 años, estando ya ubicado en Miami, cuando tras alcanzar cierta madurez vocal comienza a introducirse en el mundo profesional. Aquel joven que se encarreraba en su habitación cantando canciones del Andrea Bocceli, comienza a soñar ser artista.
La propuesta de unos amigos para que participara en un festival en Miami para interpretar el himno de Venezuela, le supuso todo un reto lleno de emociones y nervios. Ya no se encontraría en la intimidad de su hogar cantando en solitario, sino que una gran muchedumbre fijaría sus ojos mientras interpretaba el himno de USA, y posteriormente el venezolano. La expectación y emoción generada ante los asistentes hizo que los organizadores le propusieran cantar el maravilloso himno de “My way”.
A partir de este momento los éxitos se sumarían y comenzaría una andadura que le llevarían a conocer al afamado tenor venezolano Carlos Almenar Otero. El primer festival donde participó haya por el año 2009 alcanzando el Premio Estrella Award, y una larga lista de reconocimientos.
Subirse al escenario siempre ha ido acompañado de trabajos y duros ejercicios de afinación. Las puertas se le abrieron llegando a compartir escenario con artistas como Paloma San Basilio o Karina. Un inicio de carrera imparable que le llevan a conocer a un astro de la producción musical y ganador de más de 16 Grammys, llamado Humberto Gatica.
Su portentosa voz le permite cantar desde las más famosas canciones mexicanas y rancheras, pasando por las baladas que han conseguido arrejuntar y hacer nacer a muchos de nosotros.
Se define como un baladista dedicado al amor y amar. Cuando en el 2016 conoce al maestro Gatica, éste, se queda prendado de su tierna voz, y emprenden una serie de producciones que tendrían gran acogida en el mercado latino y norteamericano, comenzando con un primer sencillo llamado “Amor absoluto”, un tributo al español Julio Iglesias, por el que recibe multitud de reconocimiento internacionales. Sería el primer sencillo de lo que se ha acabado gestando como “Emociones, amor absoluto a un ídolo”, un medley de cuatro canciones en tributo a Julio Iglesias con nuevos arreglos y producciones y manteniendo la esencia y estilo de este artista poderoso.
Tal es el éxito que esta serie de producciones tienen que comienza a realizar una serie de giras que le llevan desde conciertos en las Islas Canarias, pasando por California, Nueva York entre otras muchas ciudades. Su sonrisa deja de relieve su gratitud y felicidad al ver que su trabajo durante muchos años comienza a engendrar fans allí por cualquier ciudad que pasa.
Sus redes sociales y sus docenas de miles de seguidores son fiel testimonio de esta realidad. Algo especial ha de tener este colosal artista cuando al unirse a la producción de Gatica, ha conseguido escribir su nombre junto con el de Michael Jackson, Barbara Streisand, Celine Dion, Julio Iglesias, Ray Charles, Tina Turner y otros universales del mundo de la canción.
Este ultimo trabajo se trata de un tributo al universal Julio Iglesias con unos arreglos contemporáneos, preservando el estilo propio de Edward Mena y con un color de voz y
timbre que son un masaje para los oídos y el buen gusto. Esta nueva producción, “Emociones, Mi canto al ídolo”, es el resultado de una propuesta de su manager y del propio Gatica con el objetivo de revivir una historia: “Lo mejor de tu vida,” La carretera”, “Me va me va”, “Me olvide de vivir” que en las redes sociales está teniendo un éxito arrollador al contar con miles de reproducciones y visualizaciones.
Gracias a estas canciones está siendo capaz de alcanzar a un público clásico, pero también a un nicho de mercado de jóvenes que está conociendo la música sentimental a través de su peculiar voz. Reconoce que le dio temor atreverse a cantar canciones de tal calado y magnitud, pero en todo momento se vio respaldado por Gatica. El resultado no puede ser más satisfactorio para el paladar de los amantes de la música romántica.
Desde que comenzara su carrera musical nunca ha dejado de aprender o formarse ni tampoco ha querido desechar una sola oportunidad que le han brindado para mostrar su arte. Mantenerse constante en la brecha sin desistir a pesar de los obstáculos y contra la corriente es parte de su lema y principios. Y a pesar de ello, su pasión y trabajo es la mejor cura para los momentos de desánimo. La mejor medicina para los tiempos que corren no es otra que la música del alma por medio de canciones que son eternas, y Edward Mena es uno de esos jóvenes baluartes que en muy poco tiempo seremos testigos de su profunda escalada artística.
El mundo de la música guarda algo especial para este portento de voz que se ha aliado con el romanticismo y con lo melódico. Al final Edward es aquel que “ama, ríe, canta y sueña” tal y como canta la famosa “Alma Llanera”.
Hoy 14 de abril del 2020, desde este medio, le felicitamos por su 30ª cumpleaños y le deseamos que su éxito se expanda a este lado del Atlántico para poder compartir su música con una gran legión de románticos en Europa que le estamos esperando. “Solo soy chico que ama lo que hace”-Edward Mena
Con información de El Correo de España