(23 de febrero del 2023. El Venezolano).- Con sobrecogimiento justificado por lo delicado del tema, el mundo entero está informado sobre la decisión tan desafortunada e infeliz del presidente Vladimir Putin al suspender la participación de su país en el tratado START III o Nuevo START relativo a la proliferación nuclear, signado durante 2021 entre EEUU y la nación euroasiática, socio comercial nuclear de Irán puesto que es el más ambicioso de los tratados de control nuclear con EEUU y quizá por su temor vesiánico de que occidente mediante la OTAN ataque a sus bases aéreas y quede inerme ante sus objetivos expansionistas caracterizados por una sovietización retardatoria y consumada de la Federación Rusa cuyo gobierno desempeña, condición que como exagente KGB le ofusca ante un mundo de cabeza a causa de sus desvaríos; tal vez con miras a protagonizar, entre otros, una tercera guerra mundial, tan solo por contradecir la voluntad del pueblo ucraniano de autodeterminarse.
Por Isaías Márquez
Inopinadamente, acaba de cumplirse un año del inicio de su agresión genocida a una población que le rechaza e increpa por su actitud tiránica y cruenta; lo que no obsta para que sus pobladores le demuestren coraje, firmeza y decisión irrevocables.