(15 de noviembre del 2022. El Venezolano).- El Miss Venezuela 2022, el certamen de belleza más importante considerado una «fábrica de reinas», promete el próximo 16 de noviembre cumplir un «sueño pendiente» tras dos años con público limitado por la pandemia.
El primer año de la pandemia las candidatas fueron grabadas por separado y no hubo público, mientras que el segundo año de confinamiento tuvo un público restringido.
Limitado durante los últimos ocho años a un pequeño estudio de un canal de televisión, el Miss Venezuela regresa en 2022 al Poliedro de Caracas. El evento contará con un aforo de unas 20.000 personas.
En la apertura de 2022 donde bailarán las 24 candidatas, convocaron a cinco misses ganadoras de los dos años anteriores. El gesto busca permitirles que cristalicen un sueño que la pandemia les robó, reseñó El Nacional.
«Para nosotras es un sueño también hacerlas a ellas vivir ese sueño. Varias de ellas no tuvieron la oportunidad de vivir un escenario en vivo«, dijo a la AFP Gabriela Isler, directora de Comunicaciones y Formación del Miss Venezuela.
Isler, una de las siete Miss Universo que ostenta Venezuela, señala que durante la pandemia las candidatas «fueron elegidas en un escenario que era un cubo blanco, sin público, sin familia».
Por eso en esta edición que celebra el 70 aniversario del concurso, se les dará la oportunidad de vivir este «sueño pendiente para ellas». Una de las invitadas a la ceremonia es Alejandra Conde, quien ganó el 2020 la corona de Miss Venezuela Mundo.
Ambas ceremonias sin público.
«Mi opening (inauguración del Miss Venezuela) se presentó pre grabado y mi concurso internacional también. Amo bailar y cuando me llamaron lloré de la emoción«, contó durante un ensayo este lunes.
Para Mariangel Villasmil, coronada Miss Venezuela en 2020 a puerta cerrada, estar en un opening ante miles de asistentes «es mágico».
A la llamada noche más linda también estarán Amanda Dudamel, Miss Venezuela 2021; Arianny Daboin, Miss Venezuela World 2021; e Isbel Parra Santos, Miss Internacional Venezuela 2020.