(25 de octubre del 2022. El Venezolano).- La negociación entre la oposición venezolana y el gobierno de Nicolás Maduro se ha mantenido en un impase desde el 17 de octubre de 2021. Hace 12 meses la representación del régimen venezolano se retiró de las conversaciones por la extradición del empresario colombiano Alex Saab, acusado de lavar dinero para el chavismo, a los Estados Unidos. Desde ese momento, la administración de Joe Biden ha cambiado significativamente su estrategia hacia Caracas.
Para Michael Penfold, profesor de políticas públicas y planificación estratégica, es erróneo suponer que EEUU le está restando poder de negociación a la oposición venezolana. “Mejor es decir que la oposición más extremista -escribió recientemente Penfold- se aferró a una teoría del cambio equivocada y asumió que el mundo no cambiaría. No funcionó. El poder de negociación no se presta. Es propio”.
Penfold recuerda que desde el mes de marzo de 2022 existe un canal directo de conversación entre Caracas y Washington. “Pareciera estar funcionando. Lo que acaba de suceder (en alusión al intercambio de detenidos) probablemente es el inicio de un quid-pro-quo que debe seguir con los acuerdos humanitarios y energéticos y muy probablemente negociaciones en Ciudad de México”.
Desde su perspectiva, la liberación de seis estadounidenses detenidos en Venezuela a cambio de la excarcelación en EEUU de los sobrinos de la esposa de Maduro sentenciados a 18 años de cárcel por tráfico de drogas “es uno entre varios puntos de negociación bilateral que lleva meses y es más amplio”.
Diario las Américas reseñó que Penfold se refiere a una agenda preliminar que incluye tres grandes temas que deben tratarse en la mesa de negociación de México, cuando se reanude.
Entre estos tópicos destacan lo relacionado con el tema energético y las sanciones petroleras, todo lo relacionado con el paquete de asistencia humanitaria para Venezuela. El tercer punto, que será el último en abordarse se asocia con las condiciones de las elecciones presidenciales de 2024.
Aunque la negociación oficialmente no se ha reanudado, el abogado constitucionalista Juan Manuel Rafalli -asesor técnico en varios procesos de negociación en el pasado- recuerda que la ausencia de un encuentro formal en México no significa que dejen de existir conversaciones específicas en Caracas entre los representantes de Maduro y de la oposición venezolana agrupada en torno a la llamada Plataforma Unitaria.
Sin embargo, Rafalli reconoce que la prioridad de ambos sectores no se centra necesariamente en un encuentro formal en México. Mientras el régimen de Maduro tiene se atención en la estabilización de la economía, la oposición está volcada a resolver sus pugnas a través de la organización de elecciones primarias que permitan escoger a un candidato presidencial para 2024.
Consultores de la Plataforma Unitaria contactados por DIARIO LAS AMÉRICAS -no autorizados a declarar públicamente- advierten que no debe olvidarse en el análisis del proceso que la invasión de Rusia a Ucrania ha provocado que la posición de la administración de Joe Biden sobre Venezuela sea mucho más pragmática y tenga como prioridad el tema energético.
El pragmatismo de la administración de Joe Biden es criticado por la exdiputada y candidata a las primarias de la oposición María Corina Machado. En una reciente entrevista Machado explicó que los canales que existen “desde hace meses” entre Caracas y Washington solo han servido para satisfacer el interés particular del régimen venezolano para lograr la liberación de los sobrinos de Cilia Flores.
Desde la perspectiva de Machado “esto fue una señal muy dañina para la lucha por la libertad de Venezuela (…) EEUU también transmite debilidad porque no tienen otros mecanismos para preservar o conseguir la libertad de sus connacionales sin necesidad de ir contra una decisión de su propio sistema judicial”.