(21 de agosto del 2021. El Venezolano).- Luego de que este viernes 20 de agosto el senador Gustavo Petro calificó de “cobardes” al expresidente Álvaro Uribe y a su primogénito Tomás, por las frases sobre la comisionada Lucía González, el también jefe natural del Centro Democrático le salió al pasó al director de la Colombia Humana y le respondió con vehemencia.
“El comportamiento de Uribe y su hijo frente a la comisionada Lucía Gonzalez es de cobardes”, trinó Petro luego de conocerse lo dicho por la comisionada al diario El Espectador, donde anotó detalles que no se vieron en las cámaras de la Comisión de la Verdad en el encuentro entre Uribe y el padre Francisco de Roux, cabeza de ese organismo de paz
Uribe publicó uno de sus particulares trinos para responderle a Petro: lo acusó de ser ‘chavista’ y en el mismo tono que su contendor en redes sociales le dejó claro qué opina sobre sus ‘pullas’:“Tiene otro parecido con Chávez: Petro insulta y es muy guapo, pero a distancia”, comentó el exmandatario.
El ‘tire y afloje’ entre dos de los políticos más conocidos en Colombia se dio por el fuerte altercado que protagonizó la representante González, de la Comisión de la Verdad, con el expresidente y su hijo mayor Tomás, durante el encuentro, en el que se pretendía conocer la versión del expresidente sobre los mal llamados ‘falsos positivos’.
González rompió el silencio sobre la controversia que desató su ‘rifirrafe’ con el exmandatario y su primogénito y, en diálogo con el periódico El Espectador, reveló que no esperaba la renuencia de Uribe y su hijo hacia ella, dado que tiene cercanía con Lina Moreno, esposa del político, hoy investigado por fraude procesal y manipulación de testigos.“(…) Uribe dijo que no reconocía a la Comisión, nosotros fuimos como Comisión porque no podíamos quitarnos esa investidura para pasar una cerca y decir ya no lo somos”, expresó la también arquitecta, explicando los motivos por los que acompañó a De Roux al encuentro.
La también exdirectora del Museo Casa de la Memoria criticó el cambio de planes para transmitir la entrevista, dado que se había acordado que no se publicaría sino hasta en la noche de ese lunes en las redes de Uribe, así como en las de la Comisión de la Verdad.
Sin embargo, “(…) cuando llegamos al lugar nos encontramos con la escenografía dispuesta para que él -Uribe- fuera el centro, la autoridad”, cuestionó, mientras que destacó que “Pacho”, como llama al padre De Roux, quiso continuar con el diálogo y primar lo que tenía por decir el exmandatario.“Uribe habló de respeto todo el tiempo, pero una cosa son las palabras y otra la evidencia de los actos”, Lucía González a El Espectador.
Nuevamente, la también excabeza del Museo de Antioquia en Medellín se desmarcó del uribismo, del paramilitarismo y de ser “fariana”, es decir adepta a las FARC.
A pesar de recalcar que no es uribista, González asegura que eso no le impidió hablar con Álvaro Uribe, por lo que criticó con vehemencia los prejuiciosos “patriarcales” que el expresidente utilizó para arremeter en su contra y cuestionó que Tomás y Jerónimo Uribe, así como los medios de comunicación, repliquen los ideales de quien gobernó a Colombia entre 2002 y 2010.“A un -comisionado- hombre no le hace lo que me hizo a mí, ni el hijo -Tomás Uribe- le hace lo que me hizo a mí y que no se vio en cámara: me puso el teléfono en la cara y me dijo que confesara que yo estaba del lado de las Farc”, reveló González a El Espectador, mientras que destacó que no le hace “mello” el bullying que recibe en redes sociales tras su pelea con los personajes en mención.
González recibió críticas de Uribe y su hijo por apoyar, de alguna manera, a las Farc y sus miembros, sin embargo, en su entrevista con el periódico se defendió, dijo que se solidarizó con Jesús Santrich por la huelga de hambre en la que estaba y reconoció que no borró esas publicaciones porque “no me da pena decir que siento compasión por una persona para que esté de este lado”.
La comisionada reconoció que en los testimonios ante la Comisión de la Verdad de Juan Manuel Santos, Salvatore Mancuso, Rodrigo Londoño y en el de Uribe “ha habido mentiras, por eso es importante la contrastación”.
Sin embargo, aseguró que en la entrevista al jefe del Centro Democrático “no se avanzó” en información nueva sobre las ejecuciones extrajudiciales (falsos positivos) y demás aspectos de la guerra en Colombia, en los que el expresidente habría estado inmerso.
Finalmente, catalogó el encuentro como “incómodo (…) -y- un escenario de agresión simbólica y real” del que, aseguró, no se arrepiente de haber asistido. Concluyó diciendo que hará hasta lo imposible por reivindicar a los miembros de la guerra en el país y lograr que “se sientan orgullosos de sí mismos”.