(30 de octubre de 2019. El Venezolano).- El comisionado presidencial para Relaciones Exteriores de Venezuela, Julio Borges y el embajador ante los Estados Unidos, Carlos Vecchio, sostuvieron este viernes un encuentro bipartidista con representantes del Congreso norteamericano, a quienes pidieron afianzar todos los mecanismos necesarios para la protección de los venezolanos dentro y fuera del territorio estadounidense.
Los altos funcionarios venezolanos se reunieron con el representante republicano Mario Diaz-Balart y su par demócrata Debbie Wasserman Schultz.
Borges dijo que el régimen de Maduro pasó de ser una amenaza, a un plan en marcha en conjunto con la dictadura de Cuba y grupos narcoterroristas para desestabilizar la paz y la seguridad de toda la región. Pidieron que este plan en ejecución no sea subestimado y que sea detenido mediante el accionar conjunto de los Estados Unidos y demás aliados de Latinoamérica, “a través del fortalecimiento de la estrategia de presión internacional para que Cuba deje su injerencia sobre Venezuela y así Maduro salga del poder, se inicie un gobierno de transición y se convoquen elecciones libres”.
El representante Diaz-Balart calificó la reunión como “muy positiva”, donde los “representantes legítimos del Presidente constitucional de Venezuela presentaron una serie de recomendaciones (…) para garantizar lo inevitable, la libertad del pueblo venezolano”.
Sobre la posición de la comunidad internacional sobre Venezuela enfatizó que “no importa si se es de izquierda, derecha o centro, lo importante es si se reconoce la realidad de lo que pasa en Venezuela y si se apoya al pueblo venezolano en su libertad. Lo único no negociable es que Venezuela tiene que ser libre, cualquier aliado se agradece sin importar su ideología; quienes no estén del lado de Venezuela, EEUU debe hacer todo lo posible para que entiendan que no es aceptable estar del lado de una dictadura narcoterrorista que destruye a un pueblo y que es una amenaza para la seguridad nacional de los Estados Unidos”.
La congresista Wasserman-Schultz reforzó la necesidad de asegurar de manera bipartidista que se garantice toda la presión contra el régimen de Maduro, no solo en Venezuela. “Tenemos a Cuba Rusia y China interfiriendo en Venezuela y en eso podemos influir. Esa interferencia contra la democracia en el hemisferio occidental es inaceptable (…) Maduro está hambreando a su propio pueblo, eso es inaceptable. Tenemos que asegurarnos de que se le cierre cada camino para sostenerse en el poder, tenemos que afianzar una relación con la Unión Europea y España, con el Grupo de Lima, la OEA para que todos tomen posición sobre este situación inaceptable”.