(24 de noviembre del 2020. El Venezolano).- El presidente de Chile, Sebastián Piñera, ha instado a la oposición a «respetar» la democracia, después de que un grupo de diputados haya presentado una iniciativa para forzar un adelanto de las elecciones presidenciales al próximo 11 de abril, fecha en la que los ciudadanos también elegirán a los miembros de la Convención Constituyente.
La tensión política ha aumentado después de que Piñera recurriese un proyecto promovido por la oposición para autorizar una nueva retirada del 10 por ciento de los fondos de pensiones –en julio ya se permitió una primera extracción–, en un intento por paliar los efectos que ha acarreado la pandemia de coronavirus para las economías de miles de familias.
Varios diputados han respondido al recurso judicial contra esa segunda retirada planteando que los comicios presidenciales se celebren el 11 de abril, coincidiendo también con las elecciones locales y regionales. Alegan la «falta de respuestas desde el Gobierno y Parlamento» y la voluntad de «legitimar el sistema democrático», informa la Agencia Uno.
Sin embargo, Piñera ha apelado a este mismo sistema democrático para pedir respeto. «En democracia hay que saber respetar la decisión libre y soberana de la gente y también las reglas del juego de la República», ha dicho el mandatario, al recordar que en 2017 los ciudadanos renovaron «libre y democráticamente» las principales instituciones nacionales y que la próxima «oportunidad» de votar debe ser en noviembre de 2021.
Piñera se ha pronunciado sobre esta nueva polémica en una comparecencia en la que precisamente ha oficializado la convocatoria de las elecciones a la Convención Constituyente, conforme a lo dispuesto en el referéndum de octubre y en aras del «compromiso total y absoluto» del Gobierno con un proceso lanzado a raíz de la ola de protestas de 2019.
«Tengo plena confianza en que los futuros constituyentes elegidos democráticamente por todos los chilenos van a estar a la altura de sus responsabilidades», ha dicho el mandatario chileno, confiado en que la nueva Carta Magna, que sustituirá a la heredada de la dictadura de Augusto Pinochet, reflejará los valores fundamentales.
Reuters