(24 de febrero del 2021. El Venezolano).- La ONG Temblores ha emitido este miércoles un informe en el que se contabilizan hasta 86 homicidios en los que la Policía de Colombia habría participado en el último año, siendo el caso más representativo el de Javier Ordóñez, muerto en septiembre tras la intervención de dos agentes.
«La formación del policía está inscrita en la doctrina de Seguridad Nacional, basada en la idea del enemigo interno, en la desconfianza a la ciudadanía. Así, cualquier brote de inconformismo social es asumido como un riesgo para la seguridad del Estado y como tal es repelido con todo rigor bélico y jurídico«, ha denunciado en el prólogo del texto la representante de la Cámara, María José Pizarro.
Temblores, una organización con amplio recorrido en el seguimiento de los casos de violencia policial en Colombia, ha cifrado en 7.992 las denuncias presentadas contra la Policía por abusos físicos, a los que habría que sumar una treintena más de índole sexual.
«Existe un silenciamiento significativo alrededor de la violencia sexual porque social y culturalmente está normalizada, muchas veces se traslada la culpa de la misma a las víctimas, las instituciones responden con estigma y no registran los hechos si no hay pruebas físicas«, critica el informe.
Los ciudadanos negros y migrantes son los más perjudicados por estas supuestas malas praxis policiales, que también se habría cometido contra población indígena, contra presuntos colaboradores de grupos ilegales, o consumidores de drogas.
Entre los fallecidos, la mitad de ellos entre edades que comprenden los 20 y los 29 años, hay 82 hombres y cuatro mujeres. Los departamentos que más casos de abusos policiales han registrado son Bolívar, Atlántico y Antioquia, todos ellos situados en el norte de Colombia.
ESCASA RESPUESTA DE LA FISCALÍA
En su informe de este miércoles, ‘Bolillo, Dios y Patria’, la ONG también ha incluido datos sobre los abusos policiales entre 2017 y 2019, encontrando que la institución estaría también detrás de otros 289 homicidios, según datos de Medicina Legal, lo que significa el 45,2 por ciento de los asesinatos que se le atribuyen a cualquiera de las fuerzas públicas colombianas.
«La Policía cometió un asesinato cada 3,8 días y casi dos asesinatos por semana. Es necesario preguntarnos el porqué de estas cifras tan altas en los homicidios cometidos», se pregunta la ONG en un informe en el que detalla 2018 como el año más mortífero, 103 homicidios.
Temblores ha lamentado también las escasas iniciativas por parte de la Fiscalía para depurar responsabilidades en esos tres años, pues solo se abrieron investigación en 103 de los casos, y en solo dos hubo condenas.
Para elaborar su informe, Temblores ha consultado las bases de datos de Medicina Legal, el sistema de información Red de Desaparecidos y Cadáveres y el Grupo Centro de Referencia Nacional sobre Violencia.
La muerte bajo custodia policial de Javier Ordóñez, de 42 años, tras la intervención de dos agentes, que le descerrajaron varias descargas eléctricas pese a sus súplicas, levantó una ola de indignación en varias ciudades de Colombia.
Las protestas contra la violencia policial que se sucedieron los días posteriores se saldaron con otra docena de fallecidos y más de 300 heridos. Los dos agentes implicados en la muerte de Ordóñez fueron expulsados de la Policía e inhabilitados durante 20 años.