(01 de agosto del 2024. EL Venezolano).- El gobernante Nicolás Maduro dijo este jueves, 1 de agosto, que reactivó las cárceles de Tocuyito y Tocorón para recluir a los manifestantes detenidos durante las protestas poselectorales que se registraron en Venezuela, luego de que el CNE anunciara a Maduro como ganador de las elecciones presidenciales.
«Estoy preparando dos cárceles, que debo tener listas en 15 días, ya estaban preparándose (Tocorón y Tocuyito), y todos los guarimberos van para» estos penales, aseguró el mandatario durante una reunión con empresarios, en la que reiteró que los detenidos forman parte de un golpe de Estado en su contra.
Por ello, prosiguió, decidió acondicionar estas dos prisiones, que ya existían en los estados norteños Aragua y Carabobo, «para todas las bandas de nueva generación que están metidas en las guarimbas (como llama el chavismo a las protestas antigubernamentales) y en el ataque criminal».
«No va a haber perdón ni contemplación», remarcó el líder chavista, recordando que el Estado actuará «en el marco de la Constitución y de las leyes».
Vamos a «hacer una apuesta para ver si esas cárceles de máxima seguridad logran la reeducación y convertirlas en granjas productivas, que (los presos) lleguen a producir, que lleguen a trabajar, como hacían en aquella época», señaló, en alusión a la dictadura de Marco Pérez Jiménez (1952-1958), que puso en marcha un plan de trabajo para los privados de libertad, reportó EFE.
El gobernante aseguró que los «guarimberos» atacaron las instalaciones de la UCV. “Tenemos más de 1.200 «guarimberos» capturados y vamos a capturar 1.000 más», añadió.
Miles de ciudadanos afines a la oposición venezolana han protestado desde el lunes en contra del resultado emitido por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que dio la victoria en los comicios presidenciales al dirigente Nicolás Maduro, un resultado que la oposición califica de «fraude» y que ha llevado a gran parte de la comunidad internacional a dudar del resultado y a exigir transparencia y la publicación de las actas de votación.
El Centro Carter, que participó como observador en los comicios, manifestó este martes que el proceso «no se adecuó» a los parámetros y estándares internacionales de integridad electoral, por lo que «no puede ser considerada como una elección democrática».