(20 de agosto del 2019. El Venezolano).- Mientras no existan cambios en materia política y económica, la crisis que azota a Venezuela se seguirá profundizando. Así lo aseguró Adán Celis, presidente de Conindustria, durante la presentación de los resultados de la Encuesta de Coyuntura Industrial, referente al segundo trimestre de 2019.
Los números reflejados este martes solo confirmaron una realidad que durante años viene haciendo mella en el sector industrial, patrón de toda una economía nacional que ha sido fracturada por ejecuciones fallidas por el fallecido presidente Hugo Chávez y por su sucesor Nicolás Maduro.
“Seguimos en el mismo deterioro, perdiendo empresas, puestos de trabajo, capacidad productiva y los productos que necesitan los venezolanos”, manifestó Celis, según lo reportado por El Interés.
Como una bola de nieve que se hace más grande conforme baja por la montaña, así actúa la crisis en el país. Para las empresas no hay patrón distinto, algo que reveló durante la presentación del estudio.
Lea también: A un año de la reconversión monetaria la economía de Venezuela quebró
En el mencionado lapso, y bajo una muestra de más de 100 compañías, se determinó que estas operan apenas a un 19% de su capacidad, pese a esto, “todavía los industriales de Venezuela siguen en sus empresas, batallando y defendiendo los empleos o produciendo como pueden”. A su juicio esto refleja, en ocasiones, el alto precio de los productos venezolanos: “tienes una empresa muy grande, con trabajadores, máquinas que debes mantener, pero la capacidad operativa se limita al 19%”.
El panorama no es alentador. El 91% de las empresas encuestadas señalaron que la situación económica está mucho peor en comparación con el año pasado y algunas más –el 95%– agregaron que seguirá empeorando.
Para Celis, la inversión también mermó de manera acelerada. El 81% de las compañías vieron caer sus números y el poco dinero que decidieron invertir a favor de sus proyectos fueron para priorizar el inventario y mantenimiento, pero no para incrementar la producción.
Sobre esto último, las cifras solo se volvieron más alarmantes: hasta en 80% cayó la producción de los encuestados. Las ventas se vinieron a menos en un 78% y con ellas las ganancias para la importación de productos, la cual se ubicó en el segundo trimestre del año en 36%. Mientras, solo unos pocos –19% – lograron exportar sus bienes y servicios.
