(12 de marzo del 2021. El Venezolano).- El presidente de Colombia, Iván Duque, ha alertado este viernes sobre los discursos «populistas, facilistas y demagogos» que apelan a la xenofobia y a la estigmatización de los migrantes venezolanos, después de que la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, asegurara que «una minoría» de los migrantes son «profundamente violentos», que «matan para robar».
Durante un foro de la Organización de Estados Americanos (OEA) para tratar el Estatuto de Protección de los migrantes venezolanos, recientemente puesto en marcha en Colombia, Duque ha señalado que «generalizar que las conductas obedecen según la nacionalidad» causa nuevas violencias, informa Caracol Radio.
Aunque Duque no ha aludido específicamente a López, ha agregado que «no hay nada más peligroso y grave que ver el discurso xenófobo» que, «no solamente es carente de sentimientos», sino que «muchas veces termina generando sentimientos de violencia. Asimismo, ha indicado que los migrantes han contribuido a los países que les han dado oportunidad y ha recalcado que «obrar con fraternidad hoy es una oportunidad para mañana».
Las palabras de López tuvieron lugar durante un homenaje al agente de Policía Edwin Caro, asesinado el miércoles cuando paró a dos hombres sospechosos que circulaban en moto. Aunque no se ha confirmado la identidad de uno de ellos que también murió en el incidente, sí se conoce que el otro es un ciudadano venezolano de 28 años.
«Así como se les ofrece de todo a los venezolanos, que se les dé garantías a los colombianos», dijo, subrayando que «los hechos demuestran» que «una minoría de venezolanos, profundamente violentos, que matan para robar (…) son un factor de inseguridad» en la capital colombiana. «No es la primera vez, desafortunadamente, y lo hemos denunciado (…) que tenemos actos muy violentos de migrantes venezolanos», añadió, insistiendo en que «los colombianos también necesitan garantías».
Entretanto, Migración Colombia también se ha pronunciado sobre la muerte del agente de Policía y ha aclarado que «absolutamente nadie, sin distinción de nacionalidad, tiene derecho a arrebatarle la vida a otro ser humano». «El delito no tiene pasaporte y la criminalidad debe ser prevenida y perseguida sin atención a nacionalidades».
No obstante, el director del organismo, Juan Francisco Espinosa, ha asegurado también que «aquellos extranjeros que obren de manera indebida serán expulsados», como ya se hizo con más de 200.000 venezolanos en 2020, según los datos que ha ofrecido. Más de 950 de ellos por «situaciones» registradas en Bogotá, ha agregado.
Las cifras oficiales muestran que hay poco más de 97.000 personas detenidas en Colombia, y menos del 1,8 por ciento de ellos son de nacionalidad venezolana. Espinosa ha aclarado que se trabajará en la implementación de herramientas que permitan identificar plenamente a esta población, «facilitando así los procesos de judicialización en los casos que se requiera y aumentando la seguridad de nacionales y extranjeros dentro del territorio nacional».
Según los datos de Migración Colombia, a 31 de octubre de 2020, había más de 1,7 millones de ciudadanos venezolanos en Colombia, de los que 770.000 estaban en situación regular. Bogotá, Cúcuta, Barranquilla, Medellín y Cali son las ciudades colombianas con más presencia de migrantes venezolanos.
Colombia acoge a más del 37 por ciento de los 4,6 millones de venezolanos que viven en América Latina y el Caribe después de haberse visto forzados a dejar su país.