(23 de abril del 2021. El Venezolano).- En los próximos 30 años el petróleo seguirá siendo una fuente de energía importante en Venezuela y más aún el gas, porque se cuenta con suficientes reservas de ambos combustibles y se calcula que la recuperación de la industria petrolera y gasífera venezolana, se realizaría en un plazo de ocho años desde el momento en que se produzca el cambio político en el país.
Así lo afirmó el Ingeniero Asesor en el Área de Energía del Plan País Juan Szabo, experto petrolero, quien participó como ponente en el foro “Plan de recuperación de la industria de los hidrocarburos, un proceso continuo”. Organizado por la Comisión Delegada de la Asamblea Nacional, con la participación como moderadores del evento los diputados Elías Matta y Luis Stefanelli.
En su amplia exposición Szabo es optimista y su experiencia en la materia lo confirma, que la Industria de Hidrocarburos es recuperable y además rentables, porque se cuenta con amplias reservas de crudo y gas, yacimientos en toda clase de etapas de madurez y la producción por pozo está declinando bajo las tecnologías actualmente utilizadas.
“Es un hecho que la producción de crudo pesado y mejoramiento es una combinación exitosa técnicamente y comercialmente por su capacidad de producir crudos sintéticos a precios muy competitivos. En cuanto al gas su producción es mayormente asociado hay una subutilización el país no está gasificado y no se le dan todos los usos que se deben dar en un estado de desarrollo”.
Agregó que a pesar de tantos años de actividad petrolera todavía tiene un potencial exploratorio tanto en el oriente como en el occidente y cuenta con la infraestructura para manejar cuatros millones de barriles diarios de producción. No obstante, reconoció que el sistema de refinación nacional es significativo, pero su utilización es muy baja debido a la falta de inversión y de mantenimiento.
“La escasez de personal capacitado en todas las actividades de la industria y el marco legal y fiscal actual desincentiva la inversión y por lo tanto no permite hacer un plan de recuperación, de manera que es necesario cambiarlo”.
Considera que, si se quiere una industria petrolera funcionando y reactivada para poder arrancar el proceso de crecimiento económico y su diversificación, para el beneficio de todos los venezolanos, se necesita restablecer la confianza de los mercados internacionales y dentro del país, por lo que hay que suministrar combustible y materias primas en forma segura y estable.
“Tenemos que mostrar una industria petrolera que pueda garantizar y avalar la restructuración de la deuda y preparar al país a adaptarse a los nuevos esquemas de protección ambiental”.
Para concluir, el ingeniero Szabo afirmó que existe el potencial de elevar la producción a 2,7 o 3,1 millones de barriles por día (MMBPD) dependiendo del escenario de precios a partir de los 8 años, o a partir del inicio del plan de recuperación. “La transición energética no es óbice para el renacer de la industria de los hidrocarburos en Venezuela”.
Sostiene el especialista que las nuevas realidades post-Covid y de descarbonización creciente, representan oportunidades para el desarrollo venezolano y mantenerse vigente en el mercado internacional.
Advirtió que la compleja situación política interna y la cambiante geopolítica internacional, imprimen incertidumbres a la implementación de las actividades y los posibles escenarios muestran una dispersión significativa en cuanto los resultados económicos del plan.
“Por eso es tan importante lograr el consenso político, no solo detrás de las leyes y los cambios fiscales, sino detrás del plan. Depende de nosotros tantos de los petroleros, los políticos y todo el país, si hay la luz al final del túnel”, concluyó el ingeniero Szabo.
El despilfarro del socialismo del siglo 21
El diputado Elías Matta, antes de presentar al Ingeniero Szabo hizo un recuento sobre la situación actual de la Industria petrolera del país que ha sido destruida en los últimos 20 años por el régimen Chávez-Maduro y recordó que la república recibió desde 1999 a 2019 ingresos por la renta petrolera de 984 mil 913 millones de dólares, si se suman lo ingresado en el 2020 y 2021 se sobrepasa el millón de millones de dólares y sin embargo el país está en ruinas.
“Al BCV ingresaron solo 474 mil 903 millones de dólares, es decir 48,5 por ciento y PDVSA para sus gastos operativos y para el conjunto de actividades que comenzó a realizar, porque se convirtió en una mega empresa que hacía viviendas, hospitales, hacía de todo, manejó 510 mil 010 millones de dólares, es decir 51,5 de los ingresos en dólares los manejó directamente Pdvsa. En la etapa del socialismo del siglo 21 la caja negra la tenía Pdvsa”.
LOH tiene como objeto maximizar la producción de los hidrocarburos
Por su parte, el diputado Luis Stefanelli, habló en términos generales de la nueva ley Orgánica de Hidrocarburos que tiene como objetivo maximizar la producción de los hidrocarburos, la industrialización aguas abajo, una eficiente distribución de los combustibles líquidos y gaseosos, para que exista en el país el suministros y distribución adecuados, sin inversión de fondos públicos.
Dijo que se requiere un nuevo modelo para el desarrollo de la Industria petrolera hoy colapsada, sin recursos, falta de inversión, un sistema de empresa debilitado, entre otros aspectos, por lo que es urgente adecuar, modernizar y redefinir un nuevo marco fiscal.
“La Industria Petrolera Nacional es la Palanca de crecimiento económico a corto y mediano plazo en Venezuela. Si no tuviéramos esta palanca pronosticaríamos a Venezuela en pobreza por décadas, para poder alcanzar los niveles que hemos tenido años anteriores”.
Nota de prensa