(18 de Diciembre del 2019. El Venezolano).- Por una vez las cuestiones deportivas quedan al margen en la previa del «partido de los partidos», el clásico entre Barça y Real Madrid, el encuentro que bate todos los récords con una audiencia potencial mundial de 650 millones de espectadores en 180 países, vive pendiente de una protesta social que ha cambiado el paso a todos los actores.
El partido ya ha vivido un cambio de fecha -se debía jugar el 26 de octubre– después de los incidentes registrados en Barcelona tras conocerse la sentencia del juicio del procés y la convocatoria de una acción reivindicativa por parte de la plataforma Tsunami Democràtic.
Pero casi dos meses después el escenario prácticamente es el mismo. Tsunami ha convocado a la ciudadanía a una concentración en cuatro puntos cercanos al Camp Nou a partir de las 16:00 horas y el dispositivo de seguridad, ya de por si complejo, ha aumentado en dificultad. Tanto, que ambos equipos y los árbitros compartirán hotel -a unos 600 metros del Camp Nou- y saldrán escoltados hasta el estadio unas dos horas antes del inicio del choque.
Las intenciones de los promotores de la protesta es visualizar el conflicto existente entre Cataluña y España en el escenario más grande posible, un público potencial de 650 millones de espectadores, aunque siempre han insistido que su objetivo no es «ni bloquear ni suspender» el clásico.
En lo deportivo, los dos equipos se juegan el liderato, andan empatados a puntos, y aunque el fútbol de ninguno de los dos tiene la continuidad deseable, Barcelona y Real Madrid están dispuestos a sacar adelante el partido para empezar a crecer a partir de una victoria.
Ernesto Valverde no debería tener muchas dudas en su alineación. Con todos los futbolistas disponibles, la única variación estribaría en la alineación de Sergi Roberto como lateral o como mediocampista. En el primero de los casos, la alineación sería la que la mayoría de los seguidores culés tienen en la cabeza; en el segundo, Semedo sería el lateral diestro e Iván Rakitic quien se quedaría fuera del once, pero esta última opción parece más complicada.
En la media, Busquets, pese a que no está en su mejor momento, será el mediocentro por delante de Rakitic y del holandés Frenkie de Jong, que disputará su primer clásico con la camiseta del Barça. También será el estreno para Antoine Griezmann, que acompañará a Luis Suárez y a Leo Messi. El argentino, que con 26 goles es el jugador que más tantos ha anotado en la historia de los clásico, y disputará su clásico número 42, uno menos que Sergio Ramos, que seguirá aumentando su cuenta.
Es el gran líder de un Real Madrid que añora a su nueva estrella, Eden Hazard, la gran ausencia del clásico. Cubrir su baja es la única duda por despejar para un Zinedine Zidane que llega feliz al Camp Nou, a punto de cumplir dos meses sin perder y con una mejoría en su equipo, que juega con más personalidad y exhibe mejor fútbol.
Zidane solventará el problema que tenía en el lateral izquierdo con el regreso del francés Ferland Mendy tras sanción. También vuelve descansado el brasileño Casemiro.
Será el clásico número 242. Hasta ahora el Barcelona ha ganado 96, el Real Madrid 95 y 51 partidos finalizaron en empate. Los azulgrana suman 397 goles y el Real Madrid 402. Números igualados del gran clásico del fútbol español que en esta edición llega marcado por lo que ocurre fuera del terreno de juego.
. Alineaciones probables:
FC Barcelona: Ter Stegen; Sergi Roberto, Piqué, Lenglet, Alba; Sergio Busquets, Rakitic, De Jong; Messi, Suárez y Griezmann.
Real Madrid: Courtois; Carvajal, Varane, Sergio Ramos, Mendy; Casemiro, Kroos, Valverde, Isco o Modric; Bale y Benzema.
Árbitro: Hernández Hernández (comité Las Palmas).
Estadio: Camp Nou.
Hora: 3:00 p.m.
Con información de EFE