(06 de agosto del 2021. El Venezolano).- El primer ministro de San Vicente y Las Granadinas, Ralph Gonsalves, ha sido agredido este jueves en medio de protestas contra cambios a la Ley de Salud Pública que supondría la vacunación obligatoria contra el coronavirus para algunos funcionarios de atención al público y el sector sanitario.
El suceso ha tenido lugar en la tarde de este jueves, sobre las 17.15 horas (hora local) cuando el primer ministro intentaba ingresar en la Asamblea Legislativa, en la capital, Kingstown, donde se iban a discutir las enmiendas a la legislación para las nuevas medidas frente a la COVID-19.
Alrededor de 200 manifestantes han recibido Gonsalves en una protesta a la que habría llamado la oposición, según ha indicado la oficina del primer ministro, que ha señalado también que los participantes en la movilización han impedido la entrada al edifico, tal y como ha recogido el portal local News 784.
Gonsalves ha intentado acceder al lugar andando, cuando le han arrojado una piedra a la cabeza, por lo que ha resultado herido y se le ha trasladado al Hospital Milton Cato Memorial, desde donde ha sido evacuado a Barbados. Imágenes en redes sociales han mostrado a Gonsalves sangrando de la cabeza.
Tras ello, las autoridades han confirmado la detención de una mujer en el marco de las investigaciones por agresión e intento de asesinato contra el primer ministro. La detención ha sido anunciada por la Policía y confirmada por el senador Julian Francis.
«Quiero decir que una mujer ha sido arrestada. Podría haber más. Quería presentar sus disculpas al primer ministro y le he dicho que no», ha manifestado ante el Parlamento, antes de afirmar que el único motivo era que «había sido encerrada».
«Que se disculpe ante el líder de la oposición. Déjenme decir una cosa. Tengan cuidado con lo que hacen. Las redes sociales les están vigilando y, a veces, son mejores que la Policía», ha manifestado Francis, en aparente referencia a que la sospechosa habría sido identificada por las imágenes que circulan.
Gonsalves precisó esta semana que la intención de su Gobierno no era hacer la vacunación obligatoria en el país, si bien sería un requisito para que los trabajadores de «primera línea» se inoculasen contra la COVID-19.
No obstante, indicó que la enmienda a la ley no implicaba ninguna sanción a las personas que se nieguen a vacunarse, ya que en tal caso podrían ser transferidas a otro puesto de trabajo, recoge SVG TV.
Con 110.500 habitantes, San Vicente y las Granadinas acumula actualmente más de 2.000 casos de coronavirus y doce muertes, así como ha vacunado al 8,9 por ciento de su población.