(12 de junio del 2020. El Venezolano).- Conforme Venezuela se hunde más en su crisis política y financiera, están acumulando polvo los miles de millones de dólares de activos públicos de funcionarios corruptos del gobierno venezolano y sus testaferros que han sido retenidos por gobiernos de todo el mundo, incluyendo el de Donald Trump, reseñó Univisión.
Ahora, el presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, reconocido por decenas de países y que cuenta con el respaldo de Estados Unidos, está acelerando sus esfuerzos para intentar recuperar ese dinero con el fin de ayudar a su empobrecida población a combatir la pandemia de coronavirus, además de una crisis de salud pública de larga data.
En ese contexto, el gobierno estadounidense está librando una batalla en los tribunales para mantener el control de cientos de millones de dólares de esas ganancias ilegales y que forman parte de un tesoro de activos confiscados en todo el mundo.
«Hay una obligación moral de examinar detenidamente este tema. La necesidad en Venezuela está aumentando y la corrupción es de una magnitud industrial», dijo Michael Camilleri, quien está redactando un informe sobre los fondos confiscados para Diálogo Interamericano , un grupo de expertos de Washington DC que promueve la democracia en América Latina.
Estimó que más de 1,000 millones de dólares en dinero robado se encuentra actualmente retenido en Estados Unidos, ya sea en cuentas bancarias congeladas o en fondos de confiscación del gobierno. La cifra retenida en cuentas podría ser del orden de los 24,000 millones de dólares, principalmente en Europa.
«Incluso si se pudiera recuperar una pequeña fracción de este dinero, sería una suma mucho mayor que la asistencia humanitaria total que la comunidad internacional ha podido reunir para Venezuela», dijo Camilleri.
Las autoridades estadounidenses señalan que la administración Trump ha aportado más de 610 millones de dólares desde 2017 para asistencia humanitaria de emergencia a Venezuela, incluyendo a las agencias de las Naciones Unidas, para salud, nutrición y alimentación de emergencia.
«Durante mucho tiempo, Estados Unidos se ha comprometido a encontrar una solución a la crisis provocada por el gobierno de Venezuela», dijo el secretario de Estado, Mike Pompeo, en un comunicado en el que anunció los últimos esfuerzos de la administración para presionar al régimen de Nicolás Maduro.
«La urgencia de esto se ha vuelto aún más apremiante a la luz de la incapacidad del régimen de Maduro para prepararse y abordar adecuadamente la pandemia global de covid-19», añadió.