(08 de octubre del 2019. El Venezolano).- Ángel Andrés es el nombre de una cruda realidad en Venezuela, un recién nacido que murió por negligencia hospitalaria en la región central del país. Un caso que logró conocerse ante la lucha constante de su padres por salvar la vida de su pequeño hijo con solo días de nacido.
Carolina Campos, madre del fallecido asegura que, durante su estadía en la Ciudad Hospitalaria Doctor Enrique Tejera (CHET), observó diversas situaciones irregulares, entre las cuales el propio personal de salud no cumplía con los protocolos de bioseguridad.
“En la UTIN donde estaba mi hijo entraba el mensajero, enfermeras, pasantes de imagenología sin ningún tipo de protección, es decir entraban sin batas, tapabocas, guantes, ni botas quirúrgicas. Esto es inaceptable, ya que para llegar a donde estaba mi hijo, teníamos que caminar por la emergencia de niños y por pasillos que estaban sucios y luego ellos entraban sin protección, así cualquier niño, especialmente un bebé puede agarrar una bacteria”, destacó
Luego de este caso que conmocionó a la población carabobeña, El Venezolano News, entrevistó también a una pediatra de la entidad quien explica que los protocolos para una Unidad de Cuidados Intensivos Neonatal, se deben ejecutar estrictamente, para no ocasionar la proliferación de bacterias.
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Puntualiza que entre las medidas que debe tener el personal de salud, es el uso obligatorio de batas hospitalarias, guantes, tapabocas, botas quirúrgicas, al momento de estar en la UTIN, y cuando se va a manipular a cada niño se deben cambiar por lo menos los guantes y lavarse las manos con jabón antiséptico.
Asimismo, explica que todo el personal que ingrese a la unidad como bioanalistas y técnicos de radiología deben utilizar la indumentaria antes mencionada.
También señala que, si el personal tiene sospecha de la existencia de una bacteria, se debe cerrar inmediatamente el lugar, luego realizar cultivos a todos los aparatos, es decir incubadoras, cunas, tomas de oxígenos, lavamanos, entre otros. Después realizar una limpieza profunda con antiséptico y desinfectantes.
Lo cierto del caso es que las autoridades gubernamentales y sanitarias deben dejar de ignorar esta realidad para evitar la muerte de tantos pequeños que incluso con solo horas de nacido, pierden la vida de manera injusta.