(17 de diciembre del 2024. El Venezolano).- El líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia, quien reivindica la victoria en las elecciones presidenciales realizadas en julio, llevó las actas electorales al Parlamento Europeo con motivo del premio Sájarov que recibirá este martes a la Libertad de Conciencia de 2024.
Este premio, la más alta distinción de la UE sobre derechos humanos, fue otorgado conjuntamente a González Urrutia y a la dirigente María Corina Machado, quien desde la elección de julio vive en la clandestinidad en Venezuela.
A continuación discurso completo
Acepto con gratitud, pero sobre todo con inmensa responsabilidad, la decisión del Parlamento Europeo de entregarnos el premio Sájarov a la incansable dirigente María Corina Machado y a mí.
Este premio comporta un rico legado histórico. Personalmente siento que esta distinción me compromete de forma muy especial ante la memoria de quienes me han precedido al recibirlo. Me refiero a líderes notables como Nelson Mandela, Alexander Dubcek, Alekséi Navalni o los disidentes cubanos Oswaldo Payá y Guillermo Fariñas, además de muchos de nuestros compañeros de lucha en Venezuela. Y por supuesto, a quien inspira y da nombre a este galardón: el físico y Premio Nobel de la Paz, Andrei Sajarov.
Permítanme, no obstante, aceptarlo con humildad en nombre del pueblo de Venezuela. Ese pueblo es quien verdaderamente encarna el espíritu de este premio, en reconocimiento a la valiente lucha que libra por restaurar la libertad y la democracia en Venezuela.
EN: In the elections on 28 July, the Venezuelan people expressed with clarity a sovereign mandate. However, those who still occupy the highest positions in the State have openly decided to ignore it.
This has not taken us by surprise. As Venezuelans, we know whom we are facing. We are facing a regime that gravely undermines human rights, democratic institutions, and the system of civil liberties. Ultimately, this is an autocratic state that seeks to force us to act against what our conscience tells us to do.
[Pese a la claridad del mandato soberano y popular que los venezolanos emitimos en las elecciones del 28 de julio pasado, quienes todavía ocupan las más altas posiciones del Estado han resuelto ignorarlo abiertamente.
Esto no nos ha tomado por sorpresa. Los venezolanos sabemos bien a qué nos enfrentamos. Estamos ante un régimen que menoscaba gravemente los derechos humanos, las instituciones democráticas y el régimen de libertades. Se trata, en definitiva, de un Estado autocrático que pretende que obremos contra lo que dictan nuestras conciencias.]
Quienes pretenden secuestrar lo que les pertenece a todos los venezolanos saben que, más temprano que tarde, nuestro país retomará el rumbo y dirección que ya marcó nuestro pueblo. El abuso y la violencia son hoy, sencillamente, un torpe instrumento para postergar lo inevitable. Sabemos bien que esta lucha no es ni será fácil.
Lo saben mejor que nadie nuestros presos políticos, cuyo número, por desgracia, la dictadura se ha encargado de elevar exponencialmente durante los últimos meses. Tal como lo demuestra la experiencia de quienes han obtenido este premio anteriormente, el largo camino hacia la libertad siempre ha estado minado de dificultades.
FR : C’est pourquoi je pense qu’il est opportun de rappeler ici deux choses. Tout d’abord, ce n’est pas la première fois que les Vénézuéliens affrontent des difficultés similaires. Il fut un temps où notre pays a surmonté de grands antagonismes, atteignant la maturité nécessaire pour œuvrer en faveur d’une coexistence saine entre adversaires politiques.
Malgré les nombreux moments difficiles que nous avons traversés tout au long de notre histoire, nous en sommes toujours sortis renforcés: plus résilients, plus sages et plus patients.
[Por eso creo conveniente que recordemos aquí dos cosas. En primer lugar, ésta no es la primera vez que los venezolanos enfrentamos dificultades semejantes. Ya hubo un tiempo en el que nuestro país superó grandes antagonismos, alcanzando la madurez necesaria para actuar en función de una sana convivencia entre adversarios políticos.
Si bien los momentos difíciles que se nos han presentado a lo largo de nuestra historia han sido numerosos, de todos ellos hemos salido fortalecidos: más resistentes, más sabios y más pacientes.]
En segundo lugar, de nuestra propia historia podemos concluir que ningún gobierno que se sustenta en la violencia es estable. La realidad de fondo es que los venezolanos queremos avanzar por caminos de entendimiento, libertad y democracia.
Quienes hoy usurpan las instituciones del Estado saben –y temen- que muchos de sus propios o antiguos partidarios comparten el deseo de avanzar por nuevos caminos. Por eso ganamos las elecciones del 28 de julio con tal rotundidad: porque Venezuela no está dividida, sino unida en un solo anhelo de cambio y prosperidad.
Por eso mi compromiso personal desde que asumí la candidatura presidencial de las fuerzas democráticas ha sido siempre el de tender la mano a todos los factores dispuestos a acercar posturas para avanzar por este camino de concordia y unidad nacional.
La entrega de este galardón a María Corina y a mí el día de hoy no sólo refuerza ese compromiso; también simboliza la unidad entre los demócratas del mundo, que hoy más que nunca nos necesitamos mutuamente. Venezuela cuenta con ustedes, porque la lucha por la libertad y la democracia en nuestro país también es la lucha por estos valores en todo el planeta.
¡Que Viva Venezuela Libre!