(13 de agosto del 2024. El Venezolano).- Tal como se esperaba, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) no sólo admitió el recurso contencioso electoral que introdujo el gobernante Nicolás Maduro para “aclarar” todo lo sucedido con los resultados de la elección presidencial, anunciados por el Poder Electoral, sino que se declaró competente para realizar un “peritaje” del material de votación e incluso abordar el supuesto hackeo a la transmisión de resultados.
Abogados constitucionalistas como Gustavo Manzo y organismos internacionales como Naciones Unidas ya han dicho que el TSJ invade competencias del Consejo Nacional Electoral (CNE), como poder autónomo consagrado en la Carta Magna, para “complacer” al Poder Ejecutivo y que no debió admitir el recurso de Maduro, sino ordenar al ente comicial la publicación de las actas de votación mesa por mesa para que se determine qué candidato ganó.
Pero más allá de las consideraciones constitucionales, expertos electorales consultados por Efecto Cocuyo se refieren al proceso de “certificación” de resultados que dice estar haciendo el TSJ a través de la Sala Electoral, en qué puede consistir (la información no es pública) y qué se podría esperar.
“En principio hay que dejar claro que no existe competencia del TSJ, ni siquiera de la Sala Electoral, de investigar una elección de cargo de elección popular sin que haya previa una impugnación de dicha elección. Eso de investigar y certificar una elección solicitada a instancia del candidato proclamado ganador no tiene asidero jurídico alguno, ni tampoco desde el punto de vista lógico racional. Es solo otro ejercicio de ventajismo institucional del gobierno de Maduro”, expresó el politólogo Jesús Castellanos Vásquez.
¿Qué debería ocurrir en el TSJ?
Sin embargo, al darse como un hecho la intervención del TSJ el también experto electoral señala que dicha revisión del máximo juzgado del país debería incluir las actas de escrutinio originales que debió consignar el CNE y que debieron ser resguardas por el Plan República y la revisión exhaustiva a través de los códigos de seguridad y demás elementos de autenticidad.
Cuatro rectores principales del CNE acudieron el pasado 5 de agosto a la Sala Electoral para consignar la documentación requerida por los magistrados, pero no quedó claro si Amoroso hizo entrega de las actas de votación mesa por mesa (30.026) que prometió publicar desde el 29 de julio sin que lo haya cumplido a la fecha, ni en qué formato.
Señaló además que el TSJ debería contar con un informe técnico detallado del CNE sobre el presunto ciberataque a la transmisión de resultados electorales del 28 de julio, denunciado por el presidente del organismo, Elvis Amoroso, en coro con el gobierno nacional.
“Dicha revisión debería incluir un informe justificativo del CNE sobre el boletín parcial no irreversible, la proclamación sin boletín definitivo y la no publicación de resultados del 28 de julio en su página web. También una justificación escrita del CNE sobre la suspensión de las auditorías de la red de telecomunicaciones dos, verificación ciudadana fase dos y de datos electorales fase dos e informes de las empresas Cantv, Movilnet y Exclé sobre lo ocurrido en el proceso de transmisión de resultados electorales”, apuntó.
El experto añadió que debería ocurrir, si es que el TSJ quisiera aclarar lo supuestamente ocurrido al finalizar la jornada de votación, una reconstrucción del proceso de transmisión de resultados electorales, que incluya al CNE, expertos electorales independientes, empresas responsables y partidos involucrados.
“Pero creo que esta revisión no incluirá nada de eso finalmente. Insisto: es un ejercicio de ventajismo institucional que tendrá como resultado lo que el gobierno de Maduro determine. Será una decisión eminentemente política”, concluyó el politólogo.
Sin capacidad técnica
El director del portal de análisis electoral, Votoscopio, Eugenio Martínez, subrayó que la Sala Electoral del TSJ “no tiene la capacidad técnica de verificar el material” que haya presentado el CNE si es el caso, puesto que sólo el ente comicial tiene los elementos necesarios para auditarse a sí mismo.
“Por eso es que eran tan importantes las auditorías de telecomunicaciones, verificación fase dos y verificación de datos dos, porque eso les daba a los auditores del sistema suficiente información para poder en paralelo e independientemente, auditar al CNE. En ausencia de esas revisiones, en ausencia de esas auditorías, sólo el CNE tiene la capacidad, tiene la información necesaria para verificar la información que le ha entregado al TSJ, es un círculo vicioso tremendo”, advirtió.
Agregó que como parte de la supuesta revisión que hace el TSJ sobre el presunto hackeo en las líneas de transmisión de resultados electorales, los primeros citados deberían ser los responsables de las empresas estatales Cantv, Movilnet, la empresa proveedora de la plataforma tecnológica del CNE, ExClé, el vicepresidente del CNE y presidente de la Junta Nacional Electoral, rector Carlos Quintero, y el director de seguridad digital del ente comicial, Carlos Hernández, por estar a cargo de la seguridad de las líneas, pero ello no ha ocurrido.
A juicio del periodista especializado en el tema electoral, no parece que exista una voluntad real de determinar qué ocurrió la noche del 28 de julio, sino la “contribución” del TSJ a la narrativa política sobre eventos que no se van a poder aclarar porque el Poder Electoral, reiteró, se ha negado a permitir las auditorías mencionadas.
“Vale decir que si el CNE en la madrugada del lunes presentó un boletín con 80% de las mesas escrutadas, el CNE recibió entonces 80% de la información de las actas y esa información ya debería estar disponible, sin contar que el Plan República tiene en su poder 100% de las actas y del material original de la elección”, recordó Martínez.
Desconocimiento por adelantado
Tras las elecciones regionales de 2021, el TSJ intervino primero para suspender el escrutinio de votos en la gobernación de Barinas y luego para anular los resultados que dieron ganador al candidato de la unidad opositora, Freddy Superlano, por una supuesta inhabilitación del exdiputado de 2015 y finalmente ordenar la repetición de los comicios sin que el CNE chistara en enero de 2022.
En el escenario actual, aunque analistas políticos no descartan del todo que la cabeza del Poder Judicial pudiera fallar a favor de una eventual repetición de comicios, lo ven poco probable ante el rechazo que ha generado la posibilidad, tanto en el seno de la oposición encabezada por María Corina Machado que dice defenderá el triunfo de Edmundo González, como del propio gobierno.
A medida que transcurre el tiempo sin que el CNE escuche la petición de la comunidad internacional sobre la publicación de los resultados electorales mesa por mesa, crece la desconfianza hacia cualquier anuncio por parte del TSJ que avale el supuesto triunfo de Maduro sobre Edmundo González con 51,95% de la votación (6.408.844) sobre 43,18% (5.326.104) para el abanderado opositor, según el boletín definitivo que emanó del ente comicial el 2 de agosto.
De acuerdo con el medio Clarín de Argentina, altas fuentes gubernamentales de Brasil habrían advertido que no aceptarán el fallo del TSJ en el litigio por las denuncias de fraude en las elecciones si no se publican las actas mesa por mesa.
Internamente la oposición mayoritaria atendió a medias las citaciones del TSJ sobre el proceso, al acudir los partidos de la Plataforma Unitaria a las audiencias para exigir publicación de actas de votación, mas no Edmundo González por considerar que la Sala Electoral no tiene competencia para dirimir la controversia.