(21 de septiembre del 2022. El Venezolano).- Una modificación genética logra ralentizar el crecimiento en el intestino de los mosquitos del parásito que causa la malaria, lo que impediría así su transmisión a las personas, aunque por el momento solo se ha probado en condiciones de laboratorio.
Un estudio que publica Science Advance y encabezado por el Imperial College de Londres da cuenta de esta modificación genética, con la que los mosquitos producen compuestos en sus intestinos que frenan el crecimiento de los parásitos.
Esto supone que “es poco probable” que los parásitos lleguen a las glándulas salivales de los mosquitos y se transmitan en una picadura antes de que los insectos mueran.
Hasta ahora, la técnica “ha demostrado reducir drásticamente la posibilidad de propagación de la malaria en un entorno de laboratorio, pero si se demuestra que es segura y eficaz en el mundo real, podría ofrecer una nueva y poderosa herramienta para ayudar a eliminar la malaria”, escriben los autores.
El equipo está estudiando la posibilidad de realizar ensayos fuera del laboratorio, pero para ello debe probarse a fondo la seguridad de la nueva modificación antes de combinarla con un impulsor genético que difunda la modificación.
El año pasado la malaria infectó a 241 millones de personas y mató a 627.000, la mayoría niños menores de cinco años en el África subsahariana, según los datos del Imperial College de Londres, reportó Swissinfo.
Desde 2015 “los avances en la lucha contra la malaria se han estancado” y los mosquitos “se están volviendo resistentes a las intervenciones disponibles”, por lo que es necesario “desarrollar nuevas herramientas innovadoras», consideró Tibebu Habtewold, uno de los firmantes de la investigación.
Solo un 10 % de los mosquitos vive lo suficiente para que el parásito se desarrolle hasta ser infeccioso, por lo que el equipo se propuso reducir aún más las probabilidades, prolongando el tiempo que tarda en crecer en el intestino.