(25 de octubre de 2019. El Venezolano).- El venezolano Aníbal Sánchez no es tan galardonado, o tan remunerado, como los otros tres miembros de la rotación de abridores de los Nacionales de Washington que ya han lanzado en esta Serie Mundial.
Sin embargo, lo único que ha hecho hasta ahora en la postemporada es acumular un registro de 1-0 con 0.71 de efectividad y llevar un juego sin hit hasta la octava entrada en su aparición más reciente.
El derecho venezolano de 35 años será el abridor de Washington en el tercer juego de este viernes por la noche en contra de Zack Greinke, quien subirá a la loma por Houston e intentará evitar que los Astros caigan en desventaja de 0-3, un déficit que nunca se ha remontado en un Clásico de Otoño.
“Todos hablan de nuestros Tres Grandes”, de Max Scherzer, Stephen Strasburg y el abridor del cuarto juego Patrick Corbin, dijo el jueves el manager Dave Martínez, “pero Aníbal ha lanzado increíble. Nos da la oportunidad de ganar el juego en cada una de sus aperturas”.
Greinke, quien cumplió 36 años el lunes, ha tenido problemas esta postemporada con foja de 0-2 y 6.43 de carreras limpias en tres apariciones. A lo largo de su trayectoria en Grandes Ligas, tiene marca de 3-6 con 4.44 de efectividad en 14 apariciones de playoffs, ninguna de ellas en Serie Mundial.
La última vez que Sánchez lanzó, brilló al máximo de sus capacidades al admitir un imparable — al 27mo, y último, bateador que enfrentó — y otorgó una base por bolas para ayudar a Washington a derrotar 2-0 a los Cardenales de San Luis en el primer juego de la serie de campeonato de la Liga Nacional.
Eso fue el 11 de octubre, lo que significa que Sánchez tendrá 13 días de “descanso” entre aperturas, muchos más de los cuatro o cinco que recibe generalmente.
“He estado lanzado desde febrero. Tal vez desde enero. Así que no creo que es algo que me vaya a afectar ahora”, comentó Sánchez, quien tuvo pasó 10 días desde su última aparición de campaña regular y su salida en el tercer duelo de la Serie Divisional ante los Dodgers de Los Ángeles. “Por mí, el descanso está bien”.