(22 de febrero de 2019. El Venezolano).- Todo el mundo está tenso. Todos pendientes de Venezuela. Maduro no tiene perdón y él lo sabe y de ahí su conducta, propia de rata acorralada.
Y mientras tanto, Daniel Ortega se escabulle, pero sin dejar de seguir las instrucciones del viejo Fidel: no dejar ni ceder el poder por ninguna razón.
Las noticias desde Nicaragua muestran que la situación si no es peor que la de Venezuela va camino a ello.
No está claro cuántos son los muertos, si 325 o 561 y los detenidos entre 340 o 767. El gobierno Ortega-Murillo, admite 199 muertos y 340. Qué bueno.
A ello se suman cientos de exiliados y de desaparecidos, más la represión permanente y hasta golpizas en las cárceles.
Todo espantoso. Un juez de nombre Edgard Altamirano, condenó al 216 años de cárcel a Medardo Mairena, líder campesino que participó en el Diálogo Nacional como parte de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia. Lo acusan de ser el responsable intelectual de la muerte de cinco policías y de 11 secuestros y algunos delitos más según el magistrado. Este mismo señor Edgard Altamirano por el mismo caso condenó a los dirigentes campesinos Pedro Mena y Orlando Icabalzata, s 210 y 159 años de prisión. El señor Altamirano no tiene freno: la fiscal había pedido 73 años para Mairena y 63 y 59 respectivamente para los otros dos dirigentes.
Altamirano será el juez que juzgará el próximo 18 de marzo a los periodistas Miguel Mora y Lucía Pineda Ubau, presos desde diciembre pasado acusados de terrorismo. Ortega y Murillo los acusan de hacer terrorismo; el delito que cometieron fue informar. Altamirano será el encargado de decidir.
Miguel Mora es el director y propietario del canal de televisión 100 % Noticias, y Lucía Pineda es su jefe de prensa. A fines del año pasado el canal fue allanado por fuerzas policiales y aquellos fueron detenidos y hay otros tres periodistas requeridos ya en el exilio. Los cargos «fomentar e incitar al odio y la violencia» y «provocación, proposición y conspiración para cometer actos terroristas».
Como toda dictadura que se precie la de Ortega-Murillo ha terminado con la libertad de prensa. No quieren que se sepa lo que hacen.
Y hay noticias que pueden ser peores. Parece que el gobierno nicaragüense ha aceptado discutir con la Secretaría General de la OEA, reformas a su sistema electoral, descartando de entrada un adelanto de las elecciones previstas para noviembre del 2021 que es lo que la oposición, la iglesia, los estudiantes y todo el mundo reclama . Casi dos años,- 33 meses- es mucho tiempo: ¿ cuántos serán los muertos y los presos y los desaparecidos? Hasta qué límites llegará la represión.?
¿Y todo ese tiempo sin libertad de prensa, de asociación y de reunión como hasta ahora?
‘Ortega- Murillo siguen los paso de Maduro: ganar tiempo. El venezolano con distintas ayudas en cada momento- Rodríguez Zapatero, el Papa Francisco, dos o tres presidentes vecinos, el gobierno uruguayo del izquierdista Frente Amplio y algunos europeos en los que nunca hay que confiar mucho- ha conseguido continuar en Miraflores.
Aparentemente los de Nicaragua quieren involucrar al Secretario General de la OEA con este intento de ganar tiempo . Se supone que no tendrán mucha suerte;, el Secretario de la OEA ha solicitado para el régimen nicaragüense , -acusado ya de delitos de lesa humanidad- la aplicación de la Carta Democrática Interamericana. Y Ortega y Murillo no pasan esa prueba: bastan para desnudarlos los informes de la propia Comisión de Derechos Humanos y del Relator para la Libertad de Expresión, de la OEA.
Con lo que se vive hoy en Nicaragua, con ese estado de situación, hablar de reformar y reforzar el sistema electoral parece una broma, un chiste de muy mal gusto.
Como siempre muy claro lo tuyo, seguí escribiendo Danilo!!!