(04 de febrero del 2022. El Venezolano).- A finales de mayo 2023 habrá entrado en vigor el nuevo sistema de registro de entradas y salidas en la Unión Europea. Está pensado para visitantes de países que no requieren de visado para entrar al espacio Schengen. Brasil es uno de ellos. Y en el Parlamento Europeo se prepara el acuerdo para esta nueva etapa en la movilidad entre ambos.
En 2010 se aprobó el primer acuerdo para que los países del espacio Schengen -de 26 miembros y 4 no miembros de la UE- y los ciudadanos brasileños puedan realizar estancias de corta duración, de un máximo de noventa días en un período de 180 días al año. ¿Por qué es necesario un nuevo acuerdo? Porque los visitantes tendrán que registrarse, previamente, en una plataforma digital.
“No se trata de facilitar o tornar más difícil la entrada y salida de ciudadanos europeos a Brasil y viceversa. Se trata únicamente de actualizar las normas del acuerdo de forma que sean compatibles y coherentes con el nuevo sistema”, explica a DW el eurodiputado portugués Paulo Rangel, ponente del informe en la Eurocámara.
Muchos brasileños viajan a Portugal para visitar a familiares.
¿En qué sentido deben ser «coherentes»? “Son detalles. Como ejemplo, en el acuerdo anterior se habla de tres meses; ahora, de 90 días. No son necesariamente idénticos”, sigue Rangel. “Con este adelanto digital, los pasaportes ya no necesitarán sellos”, añade.
“El interés mutuo es muy grande, en el marco de la relación estratégica entre la UE y Brasil hay mucho intercambio. Hay muchas visitas de tipo económico, de tipo científico. Se verán muy facilitadas con el nuevo sistema”, estima Rangel.
El nuevo sistema, ETIAS, por sus siglas en inglés, está pensado para que todo ciudadano que entre al espacio Schengen -por turismo, motivos empresariales, de tránsito o de salud- sea registrado y analizado en el sentido de que no represente una amenaza para los países europeos. También para que el viaje de corta duración no se convierta en una residencia permanente.
Asilo y permanencia irregular en Schengen
“Es deseable tener un conocimiento muy exacto de la situación de cada ciudadano, para que no haya abuso de las visas ni de la exención de visas. La razón de ser de este sistema es claramente tornar más fácil a las autoridades nacionales y europeas la identificación de los casos de abuso de este derecho”, continúa el político portugués.
Según datos de la UE, cada vez más los ciudadanos de terceros países que no necesitan visado entran a territorio europeo y solicitan asilo. Del total de solicitudes de asilo presentadas en la UE en 2020, el 7,3% fue de ciudadanos de Venezuela, 7,0% de Colombia, 1,5% de Perú y 1,4% de Honduras.
Por otro lado, según el Atlas de la Migración, con datos de Eurostat, la presencia irregular de ciudadanos de Centro y Sudamérica ha aumentado considerablemente entre el 2017 y el 2021. Notorio es el aumento de los ciudadanos detectados en situación irregular provenientes de Colombia, Nicaragua, Perú y Honduras.
Cabe recordar que, en América Latina y el Caribe, solamente Ecuador, Bolivia, República Dominicana, Cuba, Belice, Haití y Surinam necesitan un visado para entrar a territorio Schengen. Con respecto a los países andinos, a comienzos del siglo XX, la UE impuso visado obligatorio debido a los altos flujos migratorios que llegaron especialmente al sur del continente.
A partir del 2015, después de la entrada en vigor del Acuerdo Comercial con la UE, los ciudadanos colombianos volvieron a estar exentos de visa; ese fue el caso para los peruanos desde el 2016. La solicitud de Ecuador para gozar de la exención de visado aún no tiene éxito, a pesar de que firmó hace cinco años el Acuerdo de Libre Comercio con la UE.
“Que los ciudadanos ecuatorianos no gocen de mismas condiciones que sus vecinos es una falta en la coherencia regional que la UE defiende”, recordó esta semana Hernán Ponce, embajador de Ecuador ante la UE en la Delegación para las Relaciones con los Países de la Comunidad Andina.