(16 de octubre del 2020. El Venezolano).- El pasado martes 13 ocurrió un asesinato, el destripador de la cultura se hizo presente en la sede la Orquesta Sinfónica de Maracaibo con un transporte y despojó de llaves, instrumentos y cualquier bien-mueble que existiese, a los últimos músicos que resguardaban 62 años de memoria cultural de nuestra ciudad.La Orquesta Sinfónica de Maracaibo fue creada por decreto regional el 30 de septiembre de 1958. Su más remoto antecedente se remonta a 1933, cuando un grupo de músicos se reunió para crear el primer núcleo instrumental de la ciudad, que sucumbió ante las condiciones económicas y políticas del momento.
Hoy solo 17 músicos siguen en su plantilla profesional, luego de tener una plantilla de 68 maestros. El odio de quienes administran la Secretaria de Cultural del Estado en la actualidad, encabezados por el zanquero Wolfgang Viloria, por fin se vio consumado luego de un plan sistemático que condenaba a los músicos integrantes de la orquesta a un sueldo de hambre; y a la institución, a una sequía presupuestaria inédita.
Ya no existe la orquesta y quienes velaban por su patrimonio, fueron despojados de todo. Atrás quedó la edad de oro de la orquesta, cuando el 24 de octubre 1972, el maestro Eduardo Rahn asumió la batuta, con músicos venezolanos, polacos, norteamericanos, colombianos y argentinos. En 1975 hizo su primera gira internacional a República Dominicana; en 1977 promocionó y participó en el Festival Latinoamericano de Música Contemporánea Ciudad de Maracaibo. Más tarde hizo nuevas giras internacionales: Estados Unidos (1980), Canadá y México (1981), e Italia (1985).
En sus primeros quince años la Orquesta Sinfónica de Maracaibo ofreció casi 1.500 conciertos para 1.150.000 personas aproximadamente, con 80 directores, nacionales y extranjeros, 134 solistas venezolanos y 100 extranjeros invitados. En 1983, al cumplir veinticinco años, fue declarada Patrimonio Artístico de la Nación, por ser considerada la mejor de América Latina.
¿Ese será el delito que está pagando la Orquesta Sinfónica de Maracaibo? ¿Por qué se enseñaron con un patrimonio nacional?
En 1981 vivió su mejor momento, cuando recorrió 37 ciudades de los Estados Unidos, México y Canadá, siendo aclamada no solamente por el público sino por el New York Times y The Washington Post. Otra experiencia positiva de la OSM, fue la presentación de la ópera Rigoletto, de Verdi, en diciembre de 1995, entre tantos otros grandes momentos que vivió.
Hoy no sabemos donde están sus instrumentos;y sus archivos han sido abandonados, junto a cualquier intención de volver a escuchar a la orquesta tocar. Ha llevado peor destino que la Biblioteca Pública del Estado, cuando la quisieron convertir en un hospital.
La memoria de sus grandes directores Eduardo Rahn y Havid Sánchez, no merece nuestro silencio. El Zulia debe alzar la voz de reclamo por el asesinato de una institución, y todos, como antiguas plañideras, debemos hacer del llanto colectivo un corifeo que realce la memoria de nuestra Orquesta y no deje morir su legado.
Cuando vuelva la democracia, volverá los conciertos, pero mientras tanto que nadie marchite nuestra viudez, que sepan que estamos penando por el crimen cultural cometido por una banda de artistas resentidos.